(CNN) – Cada año los nominados a los premios Oscar reciben una exclusiva bolsa de regalos que no está relacionada con los Premios de la Academia, pero que tampoco son para todo el mundo.
Esas bolsas solo son para 25 actores y directores nominados a los Oscar cada año. Pero, ¿quién podría culpar a otros nominados por tratar de obtener este regalo?
“La gente está emocionada —es la palabra que usaría— juzgando por el número de llamadas que hemos recibido de los agentes y asistentes de los nominados que quieren asegurarse de que tenemos la dirección correcta para enviarles la bolsa”, dice Lash Fary, fundador de Distinctive Assest, que prepara las bolsas. “Cuando la gente escucha que están entregando una bolsa de regalos que cuesta seis cifras, recibimos llamadas de personas que no estaban en las categorías a las que les damos el presente”.
Este año el surtido de los regalos van desde crayones personalizados hasta estadías en una villa lujosa en la costa sur de Kauai, en Hawai.
Fary dijo que tuvo la idea hace 15 años cuando estaba haciendo bolsas similares para los Premios Grammy y escuchó a la actriz Bette Midler lamentarse de salir de la ceremonia con las manos vacías.
“Creí que debíamos hacer algo para quienes perdían”, dijo Fary. “Empezamos a darles regalos a quienes estaban entre las cinco categorías principales para que aunque se fueran a casa sin la estatua dorada en la noche del domingo, pudieran tener algunos artículos lujosos con qué consolarse”.
Y al parecer las estrellas aman los regalos, añade Fary.
Fary recuerda que les dio unas camisetas a los nominados hace unos años y vio una fotografía de la actriz Amy Adams usándola el día siguiente.
Otro año, la actriz Rosamund Pike usó un certificado de regalo para un buffet de caramelos en su cumpleaños.
Fary se negó a ponerle un precio en dólares a la bolsa de estilo de este año, diciendo solo que la cifra es de seis dígitos. (Los regalos del año pasado estaban avaluados en más de 200.000 dólares)
Pero aparentemente, incluso los mejores beneficios del estrellato vienen con un precio. Si los nominados eligen redimir algunos de los ítems que vienen en las bolsas, dice Fary, tendrían que pagar impuestos por ellos.