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Más de 20 millones perderían su seguro con reemplazo de Obamacare
02:53 - Fuente: CNN

Christie Popp, quien está embarazada de su tercer hijo, espera ansiosa que la cobertura de maternidad que tiene a través de la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA) no desaparezca.

Esa cobertura está escrita en la ley como un requerimiento de todo plan comprado a través del mercado individual. Pero eso podría cambiar si los republicanos avanzan con su plan de rechazar ACA y rehacer la ley de salud.

Popp sabe de primera mano lo difícil que fue conseguir esa cobertura antes de que las provisiones de la ley de salud federal entraran en vigencia en 2014. Cuando la abogada de 37 años de Bloomington, Indiana, tuvo su primer hijo en 2011, tenía cobertura de salud a través de su trabajo en una clínica legal sin fines de lucro. Porque el seguro tenía un deducible alto, ella y su marido pagaron 6.000 dólares de su bolsillo durante el embarazo y el parto.

Para 2013, cuando nació su segundo hijo, Popp se cambió a un seguro individual, comprado luego que instalara su propia oficina legal. “Era un seguro realmente malo, y muy costoso”, dijo. Para agregar cobertura de embarazo a la póliza tendría que haber empezado a pagar primas extra –generalmente cientos de dólares al mes– por la atención adicional de maternidad mucho antes de quedar embarazada. “Realmente tienes que planear con anticipación para sacar ventaja de esta opción”, y ellos no la tuvieron, explicó.

Para bajar sus gastos de bolsillo, ella y su esposo decidieron tener un parto a domicilio con una partera, aunque todavía Popp tuvo que pagar miles de dólares al médico que tuvo como respaldo.

Popp explicó que para el bebé número 3, los cálculos de la pareja serán diferentes: “Esta vez tengo una buena cobertura, lo que es fantástico”.

Lo es, si dura.

Christie Popp le lee a su hijo Aaron Bullman en Bloomington, Indiana. Popp está esperando a su tercer hijo que nacerá en octubre. Le preocupa que su seguro de salud cambie y no cubra su parto si Obamacare es derogado.

Los republicanos dicen que quieren desechar el requerimiento de cobertura de maternidad, que es parte de la lista de 10 “beneficios esenciales” de ACA. Es un beneficio valioso, y eliminarlo de plano no será fácil ya que implicaría complicadas maniobras en el Senado. Permanece intacto en el proyecto de ley que se está moviendo a través del Congreso, pero eso se debe a las reglas presupuestarias, no porque los republicanos quieran mantenerlo.

El precio total que se cobra por embarazo y el cuidado del recién nacido varía ampliamente pero el promedio es de alrededor de 30.000 dólares por un parto vaginal y 50.000 dólares por una cesárea, con seguros comerciales pagando un promedio de 18.329 a 27.866 dólares.

Aun así, la idea de que el gobierno federal requiera que las aseguradoras ofrezcan tipos de cobertura es una condena para muchos republicanos, ya que dicen que interfiere con la elección de las compañías y de los pacientes.

“Vamos a rechazar el Obamacare de una vez y para siempre, y a eliminar sus mandatos, impuestos, e intrusión en nuestros

negocios y en nuestras vidas”, tuiteó el vicepresidente Mike Pence el 25 de febrero.

Seema Verma, la consultora de seguros de salud privados que es la flamante directora de los Centros para Servicios del Medicare y Medicaid (CMS), dijo en su audiencia de confirmación el 16 de febrero que no necesariamente apoya mantener el cuidado materno como un requerimiento en los planes de salud.

“Las mujeres tienen que tomar las decisiones que son mejores para ellas y para sus familias”. “Algunas mujeres pueden querer cobertura de maternidad, otras no”.

Los que apoyan el requerimiento de cobertura dicen que hay un malentendido fundamental sobre cómo funciona el seguro.

“Cada vez que usted permite que la gente escoja y elija, está haciendo que el cuidado [de salud] que no elije sea más caro”, dijo Debra Ness, presidenta de la National Partnership for Women & Families.

Y hacer la cobertura de maternidad opcional puede elevar los costos no sólo para las mujeres embarazadas y sus familias, sino para la sociedad en su conjunto.

“Las personas se vuelven más costosas cuando no reciben la atención que necesitan”, dijo Ness. Por ejemplo, “si usted no ofrece una buena atención prenatal, eso lleva a peores resultados” para ambos, la madre y el bebé.

Antes que la Ley de Cuidado de Salud Asequible hiciera que se volviera mandatoria la cobertura de maternidad en el mercado individual, la mayoría de los planes no la cubrían.

“Sólo el 12% de los planes en el mercado individual cubrían maternidad”, dijo Janel George, directora de derechos reproductivos federales en el National Women’s Law Center.

Christie Popp y su esposo pagaron 6.00 dólares de deducible en su seguro por su primer parto. Ahora disfruta de un cubrimiento con Obamacare, que podría desaparecer si es derogado.

“Así que las mujeres estaban obligadas a pagar porque las compañías de seguros no tenían que hacerlo”. Aunque muchos planes ofrecían servicios adicionales de maternidad opcionales, éstos podían costar cerca de 1.000 dólares por mes. Por lo general, tenían deducibles separados y un mayor costo compartido (hasta la mitad del costo total de la atención) que el seguro regular. Es más, tenían que comprarse antes de que una mujer quedara embarazada; después, era considerado como una condición preexistente.

Los conservadores argumentan que el requerimiento de la ley de salud para ciertos beneficios ha causado que las primas aumenten astronómicamente. Pero sus defensores dicen que ese puede no ser el caso.

Sherry Glied, exfuncionario de salud de la administración de Barack Obama y decana en la New York University, dijo que cuando se miran los principales impulsores de los aumentos en el gasto de atención de salud, “la mayoría de los costos están en las cosas convencionales”, como hospitalización y atención médica.

Un estudio de 2016 para la Blue Cross and Blue Shield Association apoya esto. Halló que los aumentos de costos en el mercado individual en 2014 y 2015 fueron impulsados no por la inclusión de nuevos beneficios, sino por el hecho de que las personas con enfermedades graves, que habían sido previamente excluidas del mercado, fueron rápidos para inscribirse y obtener atención de alto costo. Por el contrario, la atención de maternidad, dijo Glied, “sale por debajo del 5%” de la prima promedio”.

En la práctica, cambiar la ley de salud para acabar con el requisito de la cobertura por maternidad por completo sería políticamente difícil. Entre otras cosas, probablemente necesitaría 60 votos en el Senado, incluyendo a ocho demócratas. Los demócratas lucharon arduamente por la inclusión de esta cobertura y otras cuestiones de salud de las mujeres en ACA. La mayoría de los analistas piensan que los republicanos no pueden cambiar los beneficios esenciales de salud como parte de la ley de presupuesto en la que están trabajando que requiere sólo una mayoría simple para su aprobación en el Senado.

“No creo que puedan reducirlo mucho”, dijo Timothy Jost, profesor de la Facultad de Leyes de la Washington and Lee University en Virginia y un defensor de ACA. Jost dijo que muchos estados adoptaron sus propias leyes o regulaciones individuales después de que se aprobara ACA para hacer la cobertura de maternidad y otras obligatoria. Muchas de ellas también tendrían que ser derogadas por separado.

Sin embargo, el gobierno de Trump podría potencialmente debilitar el requisito, permitiendo a los estados más libertad de aceptar planes menos generosos para determinar si se cubren los beneficios adecuados.

Bajo ACA, los estados tienen flexibilidad para elegir qué nivel de esos beneficios “esenciales” deben ofrecerse, de modo que los beneficios requeridos se ajusten más a lo que ya se está ofreciendo en cada estado. La administración “podría modificar esos reglamentos”, lo que podría conducir a una cobertura menos amplia, dijo George.

Con tal escenario, se volvería a los días en los que las mujeres que tenían bebés terminaban pagando gran parte de la cuenta.

Christie Popp, quien tiene fecha de parto en octubre, dijo que “está más que esperanzada” de que nada cambie antes.