(CNN Español) – Una serie de pronunciamientos en Twitter del expresidente de Colombia y ahora senador Álvaro Uribe Vélez contra el periodista Daniel Samper Ospina causaron que un grupo de importantes periodistas del país se pronunciara contra el exmandatario.
En un tuit de este 14 de julio, Uribe se refirió a Samper Ospina como un “violador de niños” y compartió una carta en la que un lector expresaba su molestia por una columna del periodista en la revista Semana en la que se burlaba de los antioqueños, habitantes del departamento de Antioquia, al noroeste de Colombia y lugar de nacimiento del expresidente.
Samper, columnista y humorista, se caracteriza por la sátira de sus publicaciones de las que pocos personajes de la vida pública colombiana se salvan.
Frente a las fuertes palabras de Uribe, el periodista se pronunció en su cuenta de Twiter diciendo que el senador lo había señalado del “atroz y asqueroso” acto de violar niños ante sus millones de seguidores.
Samper dijo que lo que hacía Uribe equivalía a un asesinato moral y que no tenía pruebas para difamarlo así. Anunció que tomaría acciones legales para no permitir que se dañe su honra:
Varios colegas de Samper salieron a su defensa, pidiéndole argumentos a Uribe de las graves acusaciones:
El 16 de julio, más de 50 periodistas firmaron una carta titulada Punto Final y que en redes se compartió con la etiqueta #Porelrespeto. En ella le piden al senador Uribe que deje la difamación y violencia de sus palabras y el “perverso juego” de difamar y rectificar luego cuando el daño ya ha sido hecho.
También hicieron un llamado a “solidarizarse con el calumniado más allá de las contingencias de la política” y a “decirle al calumniador que ha llegado la hora de que se detenga”.
Este domingo, Uribe se pronunció en sus redes sociales diciendo que “el referido periodista maltrató a una niña de tres meses de nacida, hizo asociación pública de su nombre con drogas ilícitas, y atentó contra la honra de su madre y de su familia”. El senador se refiere a una columna de Samper en la que se burló del nombre de la hija de Paloma Valencia, senadora del Centro Democrático y declarada uribista, que llamó a su bebé Amapola.
“La violación a derechos del menor, en que ha incurrido el periodista, por la naturaleza del maltrato, es violación al menor, lo cual se desprende de la ley, lo entendemos como un tema ético por su relación con la familia y la sociedad, además de connotaciones morales de acuerdo con los valores de muchas personas”, añadió.
Uribe trajo a colación escándalos pasados que rodearon a la revista que anteriormente dirigía Samper Ospina, una publicación para hombres similar a Playboy.
Uribe recordó la publicación de una polémica serie de fotografías sobre la pederastia que debieron ser retiradas de la revista pues fueron denunciadas por las autoridades colombianas como “pornografía infantil”. Ospina en ese entonces dijo que era una representación fotográfica y que el verdadero crimen es el que cometían los sacerdotes pederastas.
La declaración de Uribe promovió otra etiqueta #LoqueesconUribeesconmigo y que tuvo decenas de comentarios apoyando al expresidente y condenando al periodista por matoneo.
Samper escribió este domingo en su cuenta de Twitter que el exmandatario ha intentado desviar la atención y compartió la carta de los periodistas:
“Todo el fin de semana, Uribe ha tratado de desviar el debate y ponerme a la defensiva: no señor, demuestre que violo niños o retráctese..”
CNN en Español ha intentado contactarse con Uribe y Samper, pero no ha recibido respuesta.
El Centro Democrático, partido de Uribe, emitió un comunicado este lunes diciendo que Uribe es constantemente “objeto de calumnias, injurias y difamaciones por parte de algunos periodistas y columnistas”. El partido respaldó al expresidente y cuestionó el deber de los medios afirmando que se preguntan si el deber de informar les da “licencia para el maltrato, la difamación, la injuria y la calumnia”.
“Llama la atención que quienes hoy piden la judicialización del expresidente”, dice el comunicado refiriéndose a la carta de los periodistas, “hayan guardado siempre silencio ante el atropello sistemático que él ha recibido en ciertos medios de comunicación por parte de periodistas y columnistas”.
La comunicación afirma que “ningún colombiano ha sido ofendido y calumniado tanto como Álvaro Uribe Vélez a quien han llamado ‘asesino’, ‘paramilitar’, ‘corrupto’, ‘gamín’, ‘mano negra’, ‘narco’ entre muchos términos injuriosos a su dignidad y la de su familia y no hemos escuchado a los directores de medios ni a los periodistas exigir respeto a sus colegas”.