Gerardo Bermúdez y Lancelot, su perro guía

(CNN Español) – Un joven invidente y su perro lazarillo fueron impedidos de entrar al restaurante El Bajío, este 2 de enero en Ciudad de México. Según relata el joven, personal del negocio le explicó que no podía ingresar porque estaba prohibido llevar mascotas al lugar.

Después de que el joven denunciara el hecho en Facebook, en una publicación que se hizo viral, el restaurante no solo se disculpó sino que se comprometió a capacitar mejor a su personal para afrontar mejor situaciones como estas en un futuro.

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“Me condicionaron a estar en un balcón, en una esquina, el restaurante estaba vacío, era muy temprano y hacía frío”, precisa Bermúdez en el video publicado en Facebook y que ha sido compartido más de 2.000 veces.

Gerardo Bermúdez, el joven con discapacidad visual, aseguró que explicó al personal del restaurante que la ley del consumidor mexicana le ampara y que su perro está entrenado para guiarlo y para no molestar a nadie en lugares concurridos.

El joven hizo la denuncia ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred). “Cuando hice la denuncia es lo que pedí, no quería nada económico para mí, tampoco fama, solo que este sirva para mejorar la inclusión, para que México sea para la gente con cualquier tipo de discapacidad”, dijo Gerardo Bermúdez a CNN en Español.

Bermúdez es ingeniero de Audio y Producción de Música Popular y perdió la vista en un accidente vial hace 21 meses. Asegura que desde entonces es víctima de discriminaciones por su nueva situación “hasta cuatro veces por semana”. “No es imposible vivir así, pero sí muy complicado estar en una cultura vial, económica, laboral que es excluyente”,  asegura y agrega que ahora le es más difícil conseguir trabajo. “Si antes había que tocar dos puertas, ahora hay que tocar veinte para conseguir algo decente”, le dijo a este medio.

CNN en Español se comunicó con el restaurante El Bajío, cuyo representante aseguró mediante correo electrónico que ha tomado las medidas pertinentes. Han visto este caso como una oportunidad para aprender a brindar un servicio más inclusivo. “Nos comprometemos a brindar capacitación a todo nuestro personal para que esta situación no vuelva a ocurrir en ninguna de nuestras sucursales”, señalan en su misiva y aseguran que sí se permite el acceso de personas con perros guías y cuentan con versiones en braille de su carta de comidas. Mensajes similares fueron publicados desde su cuenta de Twitter.

Hecha la denuncia, Gerardo Bermúdez también rescata una lección de todo esto: alzar la voz. “Eso es lo que me deja esto, no callarse, hacer mi tarea y hablar… hay mucha gente con discapacidades que sufre discriminación y no se queja, no lo dicen, no hablan”, dice. “La idea es hablar de una manera respetuosa para cambiar las cosas, cambiar la cultura del país”, finaliza.