(CNN) — Las cenizas del físico Stephen Hawking serán enterradas en la Abadía de Westminster en Londres, al lado de las tumbas de los científicos Sir Isaac Newton y Charles Darwin.
En un comunicado emitido por la Abadía el martes, el reverendo John Hall, decano de Westminster, dijo que estaban preparando un tributo para el científico británico, que murió la semana pasada a los 76 años.
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“Creemos que es vital que la ciencia y la religión trabajen juntas para tratar de responder a las grandes preguntas del misterio de la vida y del universo”, dijo Hall en el comunicado.
Isaac Newton fue enterrado en la Abadía tras su muerte en 1727, igual que ocurrió con Charles Darwin un siglo y medio después, en 1882.
La Abadía anunció que haría también una misa en honor de Hawking este año.
Considerado por muchos como el mejor científico de su generación, Hawking sobrellevó una enfermedad debilitante y ganó fama en todo el mundo por su brillante trabajo en física teórica.
Nació en Oxford, Inglaterra, en 1942. Justo en el 300 aniversario de la muerte del astrónomo y físico Galileo Galilei.
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Junto con su compañero físico Roger Penrose, Hawking fusionó la teoría de la relatividad de Einstein con la teoría cuántica para sugerir que el espacio y el tiempo comenzarían con el Big Bang y terminarían en agujeros negros.
También publicó libros muy populares que permiten a los lectores unirse a él para explorar los misterios del universo. El más conocido, “Una breve historia del tiempo”, vendió más de 10 millones de copias.
Él logró todo mientras sufría ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), una enfermedad neurodegenerativa que en realidad es normal en pocos años. A él se la diagnosticaron en 1963.
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Pese a que la enfermedad lo dejó paralizado y usando una silla de ruedas para moverse, Hawking decía en su página web que no había dejado que esto le afectara a su manera de vivir su vida.
“Trato de llevar una vida tan normal como sea posible y de no pensar en mi condición, ni arrepentirme de las cosas que me impide hacer, que no son tantas”, escribió Hawking en su página web.
Tras su muerte, científicos de todo el mundo mostraron sus condolencias, con Neil DeGrasse Tyron diciendo que había dejado “un vacío intelectual con su paso”.
“Pero no está vacío. Piensa en ello como una especie de energía de vacío que impregna el tejido del espacio-tiempo que es difícil de medir”, dijo el astrofísico en su cuenta oficial de Twitter.