(CNN) – La presencia de la madre del príncipe Enrique, la princesa Diana, se hizo sentir sutilmente en la boda de su hijo con la actriz estadounidense Meghan Markle, más de dos décadas después de su muerte en un incidente automovilístico en París.
Observadores vieron un claro guiño de Meghan a su suegra, que nunca conocerá, en la elección del velo de su vestido para la boda. Más transparente que el que usó Diana cuando se casó con el príncipe Carlos en 1981, pero del mismo largo.
La primera lectura durante la ceremonia fue hecha por la hermana de Diana, Lady Jane Fellowes, quien también hizo una lectura en el funeral de Diana en 1997. Lady Jane raramente hace apariciones públicas desde la muerte de su hermana.
El hermano menor de Diana, Earl Charles Spencer, también estuvo presente en la boda.
Muchos comentaristas ven a Meghan como sucesora directa de Diana, llamada “la princesa del pueblo”.
El cantante Elton John, uno de los mejores amigos de Diana, actuó durante la recepción tras la ceremonia.
LEE: La boda real de Meghan Markle y el príncipe Enrique, y 9 maneras de celebrarla con estilo
En una entrevista con la BBC, en noviembre pasado, que marcó su compromiso con Meghan Markle, Erique dijo que estaba seguro de que su prometida y su madre habrían sido buenas amigas.
Las joyas de la boda real
Enrique incluyó dos diamantes de la propia colección de joyas de su madre en el anillo de compromiso de Meghan. Él mismo diseñó, “para asegurarse de que esté con nosotros en este viaje loco juntos”, dijo. Ellos bordean un diamante central de Botswana, donde la relación de la pareja comenzó.
“Son días como este en que realmente extraño mucho tenerla cerca y poder compartir las buenas noticias, pero con el anillo y con todo lo demás estoy seguro de que ella está con nosotros, saltando de un lado a otro en otro lugar”, dijo Enrique en noviembre de 2017.
LEE: ¿Cuánto costará la boda real?
El hermano mayor de Enrique, el príncipe Guillermo, le regaló el famoso anillo de compromiso de diamantes y zafiros de su madre a Catalina Middleton, ahora duquesa de Cambridge, cuando le propuso matrimonio en 2010.
Las flores
La floristería elegida por Enrique y Meghan, Philippa Craddock, decoró la capilla con rosas blancas de jardín, entre otras flores. Las rosas blancas fueron las favoritas de Diana y se incluyeron cuando uno de los jardines del palacio de Kensington, donde Enrique y Meghan viven en una cabaña, se transformó en un “jardín blanco” el año pasado para conmemorar los 20 años de su muerte.
Los jardineros de la Corona Británica estuvieron ocupados cultivando y preparando las flores que llenarán la iglesia en el día de la boda de Enrique y Meghan.
La novia
Los observadores han notado cualidades en la novia de Enrique que recuerdan a las de su difunta suegra. Al igual que Diana, a Meghan Markle le apasionan las causas humanitarias y sociales, y es honesta en su apoyo a las mismas.
Pese a que tuvo que cortar sus vínculos con organizaciones como ONU Mujeres y World Vision al asumir su rol en la realeza, Markle dejó en claro que desea continuar sus labores caritativas tras la boda.
En su primera aparición oficial conjunta, menos de una semana después de que se anunció su compromiso, la pareja visitó una feria benéfica organizada por la organización contra el VIH / SIDA Terrence Higgins Trust, por el Día Mundial del SIDA.
Meghan Markle también ha aparecido en un evento de la Royal Foundation junto a Enrique, Guillermo y Catalina. La fundación reúne el trabajo de caridad y campaña de los miembros jóvenes de la realeza, centrado en ayudar a la juventud, personas con problemas de salud mental, los hombres y mujeres militares en actividad y veteranos, y la conservación del medio ambiente.
Diana dedicó sus esfuerzos a obras de caridad, ayudando a personas sin hogar y discapacitadas, niños y adultos con VIH/SIDA, y también hizo campaña contra el uso de minas antipersonales.
Una fotografía de ella estrechándole la mano a un hombre con SIDA en 1987 contribuyó mucho a ayudar a romper el estigma en torno a la enfermedad, y su pasión inspiró a Enrique a continuar su trabajo.
MIRA: ¿Puedes pasar el examen de ciudadanía de Meghan Markle?
Eso, a su vez, lo ayudó a él y a Markle a forjar un vínculo desde su primera cita. “Ambos tenemos pasiones por querer hacer cambios, cambios para siempre”, dijo Enrique en su entrevista conjunta.
“Fue realmente una de las primeras cosas con las que conectamos”, dijo Meghan Markle. “Una de las primeras cosas de las que empezamos a hablar cuando nos conocimos fue sobre las diferentes acciones que queríamos hacer en el mundo y sobre lo apasionados que éramos de ver cambios. Creo que eso fue lo que probablemente dio pie a una segunda cita”, agregó.