(CNN) – Las elecciones intermedias de 2018 pasarán a la historia como las más caras de Estados Unidos.
A una semana de los comicios, el presupuesto destinado a influenciar el resultado ha alcanzado la cifra récord de 4.700 millones de dólares, de acuerdo a un registro de actividades por candidatos, partidos políticos y aliados externos.
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Los donantes demócratas están provocando este dramático aumento, según el análisis realizado por la organización no partidista Centro por una Política Responsable. Predice que el gasto superará los 5.200 millones de dólares para el 6 de noviembre, un aumento del 35% con respecto a las elecciones intermedias de 2014 y el mayor salto en al menos dos décadas.
En total, los candidatos demócratas de la Cámara de Representantes han recaudado más de 951 millones de dólares, superando con creces los 637 millones de dólares que se destinaron a sus rivales republicanos, según el recuento del centro.
El dinero recaudado directamente por los candidatos va más allá de los fondos captados por grupos externos debido a que las estaciones de televisión deben proporcionar a los candidatos la tarifa publicitaria más baja disponible en las semanas previas a la elección. Otros grupos activos en las elecciones de mitad de período, como los comités de acción política (conocidos en inglés como los super PAC) no califican para esas tarifas más económicas.
La desigual ventaja de los candidatos demócratas en la captación de fondos también se está manifestando en las contiendas más competitivas.
En el transcurso del período de elecciones, los donantes enviaron 166,8 millones de dólares a los candidatos demócratas en los 30 escaños claves de la Cámara de Representantes que CNN ha identificado pudieran conquistar los demócratas (pero no sabemos si ellos ya los tienen y pudieran entonces mantenerlos). Los republicanos en esas contiendas recaudaron solo 90,7 millones de dólares.
“No necesitas ser un analista político para decir que gran parte de esto es impulsado por la ira”, dijo sobre las crecientes donaciones a los demócratas Sarah Bryner, directora de investigación del Centro por una Política Responsable. “Hay personas en lugares como Boston, Chicago, San Francisco y Nueva York para quienes las donaciones políticas forman parte de una estrategia para expresar su insatisfacción con el presidente”, agregó.
Los demócratas necesitan revertir apenas 23 escaños republicanos para tomar el control de la Cámara de Representantes y docenas de contiendas siguen estando demasiado reñidas para poder anticiparlas.
Si bien las nuevas cifras subrayan la enorme energía que impulsa la base del partido demócrata de cara a las elecciones del 6 de noviembre, habrá que ver si el gran aporte económico a los candidatos demócratas, individualmente, tendrá éxito en las urnas.
Los grandes donantes republicanos están ayudando a compensar la diferencia en carreras cruciales y los comités del partido, liderados por el Comité Nacional Republicano, también están recaudando grandes sumas.
Entre los grandes donantes, el magnate de casinos de Nevada, Sheldon Adelson y su esposa, Miriam, llevan la delantera. Han entregado más de 113 millones de dólares a grupos que ayudan a los candidatos del partido republicano. Es la mayor cantidad de dinero que los Adelson han divulgado en un ciclo electoral.
Los mega donantes demócratas también están aportando grandes sumas. El multimillonario de San Francisco -y posible aspirante a las presidencia en 2020- Tom Steyer habían donado 51 millones de dólares a candidaturas federales hasta mediados de octubre. Y otro posible aspirante a la Casa Blanca, el ex alcalde de Nueva York Michael Bloomberg, también está firmando grandes cheques para ayudar a los demócratas.
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Michael Malbin, director ejecutivo del Campaign Finance Institute, organización sin fines de lucro, dijo que el factor más importante que podría definir los resultados de las elecciones intermedias es la percepción que los votantes tengan de Trump.
“Estamos observando una paridad aproximada tanto en los comités de los partidos como en la lista de personas ricas que apoyan a cada lado”, dijo. “El presidente es quien domina la agenda, ya sea positiva o negativamente, dependiendo de qué lado estás”.
David Wright contribuyó para este reportaje.