(CNN) – La violencia en el puerto clave de Yemen, en Hodeidah, es la peor vista en meses, alertó el coordinador humanitario de de las Naciones Unidas, poniendo la vida de los civiles en riesgo en ese país que está inmerso en una guerra civil desde hace años.
Los enfrentamientos han escalado desde que hace una semana el secretario de Estado de Estados Unidos Mike Pompeo, y el secretario de Defensa Jim Mattis llamaran a todas las partes en la guerra civil de Yemen a acordar un cese del fuego en los próximos 30 días e iniciar las conversaciones de paz.
“El repunte de la violencia es una de las luchas más feroces que hemos visto en meses”, le dijo a CNN Lise Grande, coordinador humanitario en Yemen.
Los trabajadores humanitarios temen que más de 100 civiles hayan muerto solo en la última semana en Hodeidah, ha conocido CNN.
La ciudad, que tiene instalaciones portuarias claves por las que ha llegado la ONU y otras organizaciones de ayuda humanitaria, se ha vuelto el centro del conflicto en Yemen entre los aliados árabes liderados por Arabia Saudita y los rebeldes hutíes respaldados por Irán.
Unicef, la agencia de las Naciones Unidas para la niñez, alertó que las luchas intensas en Hodeidah estaban poniendo en grave riesgo a los niños en el hospital de la ciudad.
Las vidas de 59 niños están en riesgo, dice Unicef, incluyendo 25 que están en la unidad de cuidado intensivo en el hospital al-Thawra de la ciudad.
Hodeidah y las gobiernos vecinos representan el 40% de los 400.000 niños en el país que sufren de desnutrición aguda severa, dijo Unicef. “Algunos de los más enfermos están siendo llevados al hospital para atención urgente”.
Entre tanto, hasta el 80% de los suministros humanitarios de Yemen, combustible y bienes comerciales están siendo entregados a través del puerto de Hodeidah, alrededor del cual se informa que la lucha se ha intensificado, dijo la agencia.
“La pérdida de vidas podría ser catastrófico si el puerto resulta dañado, destruido o bloqueado”, alertó la agencia.
El conflicto de tres años entre la coalición saudí, respaldada por Estados Unidos, y los hutíes respaldados por Irán, ha devastado Yemen y matado al amenos 10.000 personas.
La coalición liderada por los saudíes aseguró el lunes que había tenido ganancias significativas en la batalla para tomar Hodeidah de los hutíes.
Los rebeldes notaron una escalada en los bombardeos aéreos y dijeron que esto contradecía los llamados de la semana pasada a un cese del fuego.
“Condenamos vehementemente los ataques intencionales a áreas residenciales (por la coalición) y lo consideramos como intento para impedir cualquier conversación con el fin de parar la guerra y alcanzar la paz”, dijo el líder hutí Mohammed Ali al-Houthi en un comunicado.
Expertos de la ONU del Programa Mundial de Alimentos dicen que los bombardeos de la coalición contra civiles son potenciales crímenes de guerra y que el bloqueo parcial del país ha puesto a 12 millones de hombres, mujeres y niños en riesgo de hambruna que podría volverse la peor en 100 años.