(CNN) – Samuel Oliver-Bruno dejó una iglesia santuario en Carolina del Norte para reunirse con funcionarios de inmigración, temiendo que nunca volvería.
Oliver-Bruno tenía una cita con los funcionarios de inmigración para proporcionar huellas dactilares y discutir una petición para retrasar su deportación. Fue acompañado por líderes religiosos y otros defensores este viernes para el viaje de 21 kilómetros a las oficinas en el área de Raleigh.
Aproximadamente 20 minutos después de que ingresó a las oficinas de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, lo arrestaron agentes no uniformados.
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Los líderes religiosos y los miembros de la iglesia rápidamente formaron un muro humano alrededor del vehículo que llevaba a Oliver-Bruno, y no se fueron.
Engancharon los brazos alrededor de la camioneta dorada sin marcar de los agentes y oraron durante unas dos horas. Cantaron “Amazing Grace” y otras canciones religiosas.
“¡Déjalo quedarse!”, gritaron.
Pastor: la cita era ‘una trampa’
Las autoridades lo arrestaron como parte de una “acción de cumplimiento dirigida”, dijo el portavoz de ICE Bryan Cox.
“El Sr. Oliver-Bruno es un delincuente condenado que ha recibido todos los procesos legales correspondientes de acuerdo con la ley federal, no tiene apelaciones pendientes y no tiene base legal para permanecer en Estados Unidos”, dijo Cox.
Las personas que lo acompañaron no siguieron las órdenes de dispersarse, y 27 de ellas fueron arrestadas sin incidentes, dijo el Departamento de Policía de Morrisville.
El pastor Cleve May dijo que los miembros de la iglesia temían que esto pudiera suceder.
“Se presentó como una cita legítima, pero ICE utilizó el debido proceso como trampa”, dijo May. “Así que fuimos a la cita con él para ofrecer protección, sabiendo que no se podía confiar en ICE. Pensábamos que entraríamos y saldríamos en 30 minutos”, dijo.
Fue arrestado en la frontera
Oliver-Bruno nació en Veracruz, México y llegó a Estados Unidos hace más de 20 años para vivir en Greenville, informó la afiliada de CNN, WRAL.
En 2014, Oliver-Bruno fue arrestado en El Paso, Texas, después de que intentó ingresar a Estados Unidos utilizando un certificado de nacimiento de Texas, según documentos judiciales.
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Más tarde admitió que era de nacionalidad mexicana y que había pagado mil dólares por el documento. El caso de Oliver-Bruno ha sido objeto de varias apelaciones desde entonces, dijo Cox.
11 meses viviendo en iglesia santuario
Para evitar la deportación, vivió en la Iglesia Metodista de CityWell United en Durham, Carolina del Norte, durante 11 meses. ICE generalmente evita los arrestos en “lugares sensibles”, como las casas de culto.
Oliver-Bruno teme ser deportado y dejar a su hijo y su esposa, que sufre de Lupus y otras afecciones médicas.
El año pasado, la Iglesia Metodista de CityWell United aceptó acogerlo pero el edificio no estaba listo para él. Ayudó con las renovaciones, incluida la construcción de un dormitorio y una ducha.
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Durante su tiempo en la iglesia, asistió a clases para aprender inglés como segundo idioma, tocó la guitarra y leyó durante las celebraciones.
Con la ayuda de miembros de la comunidad, Oliver-Bruno, quien es un aspirante a ministro bautista, continuó sus estudios en la Escuela de Divinidad de la Universidad de Duke después de que su clase acordara reunirse en la iglesia, dijo el grupo de defensa Alerta Migratoria.
Pero la incertidumbre y la espera también llegarían a él.
“Mientras continuaba encerrado, a veces siento la necesidad de ser libre. Necesito trabajar, hacer las actividades que solía hacer, comprar medicamentos para mi esposa y el médico”, dijo en un video publicado por defensores días antes de su arresto.
Congresistas ‘extremadamente alarmados’ por el arresto
Su arresto significa que otros que han buscado refugio en otras iglesias tampoco están a salvo, dijeron los defensores.
Los congresistas David Price y GK Butterfield dijeron que están “extremadamente alarmados” por la detención, y acusaron a las agencias de inmigración de coordinar el arresto.
Oliver-Bruno no será deportado de inmediato. Los congresistas dijeron que ICE se ha comprometido a permitirle permanecer en detención en Estados Unidos mientras se resuelve su caso.