(CNN) – Los padres de un luchador negro de 16 años de un equipo universitario, al que le obligaron a que le cortaran sus rastas antes de un combate, se han manifestado por primera vez desde el incidente.
Charles y Rosa Johnson, hablando a través de su abogado Dominic A. Speziali dijeron en un comunicado este lunes que la conducta del árbitro que obligó a su hijo Andrew a cortarse el cabello “parece más atroz cuando la información adicional sale a la luz”.
Alegan que el árbitro llegó tarde al encuentro y no cuestionó el cabello de su hijo ni la necesidad de cubrirse la cabeza durante la evaluación inicial.
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El árbitro no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios de CNN este martes por la tarde.
Más tarde, el árbitro le dijo a Andrew que su cabello y gorro no cumplían con las regulaciones de la liga, dijo Speziali en el comunicado.
Andrew le dijo al árbitro que podía echar su cabello hacia atrás, dijo Speziali, pero el árbitro se negó porque el cabello de Andrew “no estaba en su estado natural”.
Así que dio un ultimátum: cortar las rastas o perder el partido. Andrew eligió cortarse el pelo en lugar de perder el partido, según una carta del superintendente del distrito escolar David Cappuccio Jr.
El video de un entrenador que cortaba el cabello de Andrew con unas tijeras en el medio del gimnasio se volvió viral este viernes, luego de que un reportero local de South New Jersey Today lo compartió.
“El árbitro está detrás de ellos para que (la mujer) siga cortando hasta que esté satisfecho con la longitud”, dice Speziali en el comunicado.
El luchador ganó el combate en una victoria repentina en tiempo extra, según SNJ Today.
El adolescente luchó con ese cabello antes del infame partido
Los padres de Andrew dijeron en el comunicado que la lucha le enseñó a “ser resistente frente a la adversidad”.
“A medida que avanzamos, nos sentimos cómodos tanto por la fuerza del carácter de Andrew como por el apoyo que ha recibido de la comunidad”, dijeron.
“La culpa aquí recae principalmente en el árbitro”, dice Speziali en la declaración, “y aquellos que le permitieron continuar en ese rol a pesar de la clara evidencia de lo que debería ser una transgresión descalificadora relacionada con la raza”.
En partidos anteriores en un torneo una semana antes, Speziali dijo que Andrew luchó sin problemas.
De acuerdo con el libro de reglas de lucha libre de la NFHS, el cabello de un luchador no puede caer debajo de la parte superior del cuello de una camisa en la parte posterior, debajo de los lóbulos de las orejas de los lados o debajo de las cejas.
Si es más largo de lo que permite la regla, el luchador tiene que trenzar su cabello u ocultarlo debajo de una cubierta de cabello pegada a sus protectores auditivos, según el libro de reglas.
El Director Ejecutivo de la Asociación Atlética Interescolar del Estado de Nueva Jersey (NJSIAA), Larry White, dijo en una declaración que las autoridades estatales están investigando el incidente.
El árbitro no será asignado a partidos hasta que el incidente “haya sido revisado a fondo”, dijo White.
“Finalmente, como afroamericano y padre, así como exeducador, entrenador, oficial y atleta, entiendo claramente los problemas en juego, y probablemente mejor que la mayoría”, agregó White.
En un comunicado el viernes por la noche, una portavoz de la oficina del fiscal general de Nueva Jersey, Gurbir Grewal, dijo que su división de derechos civiles abrió una investigación sobre el incidente como parte de un acuerdo de 2013 con la NJSIAA “para abordar posibles sesgos en los deportes de la escuela secundaria”.
Reacciones de deportistas profesionales
El video de Andrew recibiendo el corte de cabello con unas tijeras en el gimnasio provocó indignación.
Jordan Burroughs, cuatro veces campeón del mundo y luchador campeón olímpico de 2012, publicó un hilo en Twitter en el que hablaba de lo orgulloso que estaba de Andrew y le expresó su disgusto por la situación.
“He estado luchando durante 25 años, en todos los niveles, y nunca he visto a una persona obligada a cortarse el pelo durante un partido”, escribió Burroughs en Twitter. “Mi opinión es que esta fue una combinación de abuso de poder, racismo y simplemente negligencia”.
Burroughs también comentó cómo el cabello de Andrew era parte de su identidad y que los entrenadores y los padres del equipo de lucha deberían haber hecho más para proteger a Andrew.
Aljamain Sterling, un luchador de UFC, también comentó sobre el incidente.
“¡El epítome de una sobredosis de poder! Me alegro de que el muchacho haya ganado el partido después de haber hecho un sacrificio por la venganza que el árbitro tenía contra él, el equipo u otro razonamiento. ¡Eso NO estuvo bien! Avergonzado”, decía su tuit.