(CNN Español) – Del 7 al 27 de enero se han detectado 1.684 tomas clandestinas de combustible en México, según informó este lunes el general Homero Mendoza Ruiz, jefe del estado mayor de la defensa nacional de México.
Según Mendoza, se han localizado 293 tomas, 184 de ellas son en el ducto de Tuxpan - Azcapotzalco. Es en este lugar donde se ha identificado que hay la mayor cantidad de tomas clandestinas entre localizadas, no localizadas y no reportadas: 636.
Mendoza señaló que las 1.022 tomas no localizadas se deben a que el sistema no es tan preciso y no da la ubicación exacta.
Las no reportadas, por su parte, corresponde a las localizadas por las fuerzas armadas y la policía federal de México que no habían sido detectadas previamente por Pemex.
La red de Pemex tiene más de 16.000 kilómetros de ductos para distribuir los hidrocarburos en el país, según informó la empresa.
“Cuando nuestros sistemas detectan una baja significativa de presión en algún punto de los ductos, el personal de Pemex analiza el caso particular, y de confirmarse que se trata de una toma clandestina o fuga, se procede a revisar las condiciones específicas de presión, ubicación, altitud y otras variables relevantes”, afirma.
Un incendio provocado por una toma clandestina en un ducto de combustible se registró este lunes en el estado mexicano de Hidalgo, informaron autoridades, sin que hasta el momento se reporten lesionados.
La Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo dijo en Twitter que corporaciones de seguridad atendieron el incendio en el municipio de San Agustín Tlaxiaca.
De acuerdo con la dependencia estatal, el incendio fue controlado por el Cuerpo de Bomberos.
La Secretaría de Defensa de México dijo en Twitter que había aplicado el plan de emergencia DN-III-E en su “Fase de Auxilio” por la fuga en el ducto y que elementos del ejército proporcionan seguridad perimetral en el área.
Este incidente ocurre 10 días después de que la explosión de un ducto de gasolina, también en el estado de Hidalgo, el 18 de enero, dejara hasta el momento 115 muertos y 32 heridos, según las últimas cifras ofrecidas por el secretario de Salud de México, Jorge Alcocer.
Ese día, cientos de personas recolectaban gasolina que se había fugado de un ducto, cuando se presentó la fuerte explosión.
Decenas murieron calcinados y la mayoría de heridos sufrió quemaduras severas.