(CNN Español) – El expresidente de Brasil Luiz Inacio Lula da Silva fue condenado a 12 años y 11 meses de prisión en una segunda causa como parte de la investigación de Lava Jato, publicó la agencia estatal Agencia Brasil.
La sentencia fue decida por una jueza en primera instancia, por lo que caben recursos de apelación por parte del expresidente.
La policía federal de Brasil investigaba si trabajos de remodelación de una propiedad frecuentada por la familia de Lula en la región de Atibaia, Sao Paulo, fueron realizados por compañías involucradas en esquemas de corrupción y que fueron favorecidas en su Gobierno con contratos amañados con la petrolera estatal Petrobras, como Odebrecht y OAS.
Según Agencia Brasil, el contrato de la remodelación estaba valorado en unos 1,7 millones de reales. La sentencia establece que el expresidente estaba enterado de los esquemas de corrupción utilizados en dichas compañías y que contribuyó directamente a que estas acciones ilícitas continuaran.
El expresidente ha dicho en ocasiones anteriores que él no es el dueño de dicha propiedad y niega responsabilidad.
Sin embargo, la jueza determinó que existen pruebas suficientes de que el presidente se benefició y recibió dinero de estas compañías a través de las concesiones del proyecto de remodelación, aunque no fuera el dueño de la propiedad.
Desde abril de 2018 Lula cumple una condena de 12 años por delitos de blanqueo y ocultación de dinero, derechos y bienes por la supuesta propiedad de un apartamento en la localidad costera de Guarujá que habría recibido del grupo de ingeniería OAS a cambio de favores para la obtención de contratos millonarios en la estatal petrolera Petrobras.