(CNN) – El presidente de Haití, Jovenel Moise, usó su página de Facebook el jueves para expresar sus condolencias a las víctimas que perdieron la vida y sus propiedades en recientes protestas callejeras violentas en la capital, Puerto Príncipe. También expresó su solidaridad con aquellos en situaciones humanitarias extremas que no tienen acceso a alimentos o asistencia médica.
Las protestas han sacudido la capital con batallas callejeras y el uso de gases lacrimógenos por parte de la policía para dispersar a las multitudes. Los manifestantes protestan por el aumento de la inflación y exigen la renuncia del presidente.
“Nunca los traicionaré”, dijo Moise, quien pidió el apoyo de los haitianos y reconoció las dificultades que enfrenta el país. Además, anunció que el gobierno está tomando una “amplia gama de medidas”, las cuales serían explicadas más adelante por el primer ministro Jean-Henry Ceant.
El país enfrenta una crisis desde julio, dijo el presidente, y las condiciones han empeorado recientemente, añadió. Le dijo a la nación que no dejaría que el país cayera en manos de criminales, instó al diálogo y acentuó la necesidad de encontrar una solución política.
El secretario de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, se reunió el jueves con el ministro de Relaciones Exteriores de Haití, Bocchit Edmond, en Washington para analizar las recientes protestas violentas en el país.
“Llamamos a todos los actores a participar activamente en el proceso de diálogo, respetar el proceso democrático y recurrir a formas pacíficas para resolver conflictos”, tuiteó Almagro.
El martes, el presidente de la Comunidad del Caribe (CARICOM) emitió un comunicado diciendo que la organización está “profundamente preocupada por las continuas protestas violentas en Haití, que han ocasionado la pérdida de vidas, propiedades y destrucción de infraestructura y gran angustia”.
Continuó diciendo que la CARICOM pide el fin de la violencia y llama a los involucrados a” dialogar y respetar la constitución, el Estado de derecho y los procesos democráticos” para volver a la paz.
El Departamento de Estado de EE. UU. emitió una alerta de viaje de nivel 4 para ciudadanos estadounidenses citando “manifestaciones generalizadas, violentas e impredecibles en Puerto Príncipe y en otras partes de Haití”.
Hasta el jueves, el Gobierno de Estados Unidos había ordenado a todo el personal no esencial y sus familias evacuar la nación caribeña y dijo que tenía “capacidad limitada para proporcionar servicios de emergencia a ciudadanos estadounidenses en Haití”.
Canadá también emitió una alerta de viaje a Haití “debido a los disturbios civiles en el país”, incluidas barricadas en llamas que interrumpen el tráfico en las principales calles de Puerto Príncipe. La canciller canadiense, Chrystia Freeland, dijo que los canadienses que necesiten asistencia consular de emergencia pueden ponerse en contacto con el Centro de Vigilancia y Atención de Emergencias, ya que la Embajada de Canadá en Haití fue cerrada el jueves.
El domingo, la Policía Nacional de Haití reconoció las manifestaciones del 7 de febrero, y recordó a los agentes que apoyen las protestas pacíficas y prevengan el vandalismo. El director general de la Policía Nacional de Haití, Michel-Ange Gedeon, dijo que “personas malintencionadas” se habían infiltrado en las manifestaciones y habían comenzado a disparar y arrojar piedras.
“Expreso mi agradecimiento a todos los amigos de la comunidad internacional que siguen respaldando al pueblo haitiano”, dijo el presidente en su mensaje del jueves. “Quiero que entiendan que estoy con ustedes”.