(CNN) – Venezuela enviará alimentos para alimentar a niños colombianos hambrientos, dijo el lunes el ministro de comunicaciones Jorge Rodríguez, citando estadísticas sobre la pobreza en la vecina Colombia, incluso mientras los ciudadanos de su país luchan contra la escasez de alimentos.
Rodríguez dijo en un mensaje televisado que más de 20.000 cajas de alimentos se enviarían a la ciudad fronteriza colombiana de Cúcuta, en una réplica evidente a los esfuerzos internacionales para enviar alimentos a los hambrientos venezolanos.
Cúcuta ha ganado prominencia internacional como un punto de recolección para los envíos extranjeros de ayuda humanitaria a Venezuela, que hasta ahora han sido rechazados por el régimen de Maduro. También es la primera parada para muchos que huyen de Venezuela; muchos de los niños necesitados que viven allí son, de hecho, venezolanos.
El líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, quien se declaró presidente en enero, hizo un llamado a la comunidad internacional para enviar alimentos a Venezuela a principios de este mes.
Estados Unidos ya respondió: el sábado, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) depositó una segunda entrega de suministros en Cúcuta, que incluye kits de higiene y productos nutricionales para niños. Hasta ahora, la ayuda está esperando en los almacenes, y no ha cruzado a Venezuela.
Según un estudio universitario anual que supervisa estrechamente las condiciones sociales en Venezuela, casi el 90% de los ciudadanos vivían en la pobreza en 2017.
El estudio reveló que los venezolanos perdieron un promedio de 10 kilos, resultado de los que algunos llaman la “dieta de Maduro”, en referencia a la inflación desenfrenada y la escasez de alimentos que han azotado al país bajo el liderazgo de Maduro. Maduro ha argumentado que la campaña de ayuda de Guaidó no es necesaria y dice: “No somos mendigos”.
Sin embargo, el país sí aceptó ayuda antes de su actual crisis política, con US$ 9,2 millones en alimentos y suministros sanitarios aprobados por Naciones Unidas en noviembre de 2018.
Mientras la oposición venezolana planea introducir envíos de ayuda humanitaria al país el 23 de febrero, no está claro cómo lo harán sin el apoyo del ejército y la policía, que siguen siendo leales a un desafiante Maduro.
Varias protestas han estallado en las calles del país desde la crisis, pidiendo a Maduro que deje pasar los envíos de ayuda humanitaria al país económicamente paralizado.
Naciones Unidas y la Cruz Roja Internacional han pedido a ambas partes en Venezuela que no politicen la ayuda humanitaria.