(CNN) – El Pentágono está dando pasos para desarrollar nuevos misiles, luego de la decisión del gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de suspender el Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio (INF), un acuerdo de control de armas de 1987 que el gobierno estadounidense dijo que planea abandonar debido a las violaciones rusas.
“Comenzaremos las actividades de fabricación de componentes para respaldar las pruebas de desarrollo” de misiles convencionales lanzados desde tierra, dijo a CNN la teniente coronel Michelle Baldanza, portavoz del Pentágono, en un comunicado.
Agregó que estas actividades “habrían sido incompatibles con nuestras obligaciones en virtud del tratado” antes de la decisión de la administración el mes pasado para suspender las obligaciones del acuerdo, aunque subrayó que el misil no era nuclear.
“Esta investigación y desarrollo están diseñados para ser reversibles, en caso de que Rusia regrese a un cumplimiento total y verificable antes de que nos retiremos del tratado en agosto de 2019”, agregó.
Aunque el Pentágono comenzó a investigar conceptos para el misil en 2017 en respuesta a las actividades de misiles rusos, esa investigación se consideró compatible con el tratado.
A principios de este mes, el Kremlin emitió un comunicado en el que decía que el presidente Vladimir Putin había firmado un decreto que suspendía la implementación del Tratado INF.
Estados Unidos ha acusado a Rusia de violar el tratado mediante el desarrollo y despliegue del misil de crucero de lanzamiento en tierra SSC-8 / 9M729, una acusación respaldada por la OTAN y negada por Rusia.
Rusia está “renovando sus fuerzas nucleares, incluidas aquellas que amenazan el territorio europeo, como el misil de crucero SSC-8 / 9M729 con capacidad doble, que viola el Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio (INF)”, dijo el general Curtis Scaparrotti, jefe del Comando Europeo de Estados Unidos, en un comunicado presentado al Congreso a principios de este mes.
“Rusia busca tener ventajas sobre Estados Unidos y sus aliados europeos a través de su incumplimiento de los tratados de control de armas de larga. Sus violaciones del Tratado INF le permitieron a Moscú desarrollar capacidades a las que Estados Unidos siguió renunciando”, agregó.