(CNN) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó su amenaza de cerrar la frontera sur el viernes, al tuitear que “si México no detiene de inmediato TODA la inmigración ilegal que ingresa a Estados Unidos a través de nuestra frontera sur, CERRARÉ la frontera, o grandes secciones de la frontera, la próxima semana”.
Primero los hechos: dependiendo de lo que quiera decir, el presidente puede “cerrar la frontera”, pero casi seguramente enfrentará una gran cantidad de problemas legales que podrían reabrir rápidamente los puertos de entrada.
Para justificar legalmente esta acción potencial, un funcionario de la administración de Trump señaló varios estatutos, entre ellos los artículos 212 (f) y 215 (a) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, la misma que la administración utilizó para la prohibición de viajes, así como como el 19 USC 2, que permite a la agencia de Aduanas y Protección de Fronteras cerrar cualquier oficina de aduanas o puerto de entrada. Lo que importa es cómo el uso que le dará Trump a estos estatutos se sostendrá ante una corte.
No está claro lo que Trump quiere decir con “CERRARÉ la frontera, o grandes secciones de la frontera”. Presidentes anteriores reforzaron fuertemente la seguridad o cerraron partes de la frontera al menos cuatro veces: después del asesinato de John F. Kennedy, para evitar las importaciones de cannabis, después de que un agente de la patrulla fronteriza fuera secuestrado e inmediatamente después del 11-S. Todos esos casos fueron de corta duración.
En este caso, hay varios escenarios diferentes que el presidente podría buscar – todos bajo el argumento de “seguridad nacional” – y cada uno enfrenta su propio problema legal. Y si, en los juicios que probablemente se presenten, un tribunal emite una orden judicial preliminar, el gobierno tendría que volver a abrir la frontera.
Portadores de ‘green cards’ y ciudadanos estadounidenses
El presidente se encontraría con algunos problemas si cierra la frontera a los portadores de “green cards” y ciudadanos estadounidenses, dijo a CNN el profesor de Práctica de Derecho de Inmigración en la Escuela de Derecho de Cornell, Stephen Yale-Loehr. “Podrían argumentar que hacerlo viola sus derechos de la Primera Enmienda a la libertad de asociación y viaje”, dijo Yale-Loehr.
Durante la primera prohibición de viaje, Yale-Loehr señaló, el gobierno Trump eliminó la prohibición a ciertos portadores de “green cards”, posiblemente porque creían que esto no se sostendría en los tribunales si la prohibición se mantenía.
Solicitantes de asilo
Si Trump intenta cerrar la frontera a cualquiera que busque asilo, el presidente podría tener problemas legales con el Congreso, argumentó Stephen Legomsky, ex abogado principal de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos en el gobierno Obama.
“El Congreso ha creado un sistema complejo e integral que establece los criterios de elegibilidad y los procedimientos para decidir quién tiene permiso para ingresar a EE.UU. y quién no”, dijo Legomsky a CNN, señalando que si la frontera se encuentra cerrada, nadie estaría disponible para recibir solicitudes de asilo en los puntos de entrada. “Eso anularía todo el objetivo del proceso de asilo designado por el Congreso”, dijo Legomsky.
El programa de Trump que requiere que los solicitantes de asilo se queden en México antes de sus audiencias ya está siendo revisado en la corte, dijo Yale-Loehr, y señaló que un cierre completo de la frontera podría violar la Ley de Refugiados de 1980. La ley “proporciona un procedimiento permanente y sistemático para la admisión a este país de refugiados de interés humanitario especial para Estados Unidos “. Si los solicitantes de asilo no tienen acceso a este procedimiento de admisión, cerrar la frontera por completo podría violar la ley.
Comercio
Trump dijo que cerrar la frontera podría implicar detener “todo el comercio” y que “con un déficit como el que tenemos con México … cerrar la frontera será una operación con ganancias”.
Si es cuestionado por México, la administración podría señalar el Artículo 2102 del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que establece que los países que han firmado el acuerdo pueden tomar “acciones que consideren necesarias para la protección de sus intereses esenciales de seguridad”.
Sin embargo, es probable que las compañías estadounidenses que adquieren en México productos, piezas, etc. demanden, dijo Yale-Loehr.
“El comercio con México supera los US$ 1,7 mil millones diarios”, según la Cámara de Comercio de Estados Unidos, que dijo el lunes que la sola amenaza de Trump podría crear incertidumbre económica que podría perjudicar el crecimiento observado durante este gobierno.
El efecto económico sería desastroso, le dijo a CNN Edward Alden, miembro sénior del Consejo de Relaciones Exteriores, Edward Alden.
“Cerrar las fronteras clausuraría muchas empresas estadounidenses y lo haría rápidamente”, dijo Alden, citando la crítica escasez de piezas que las compañías de automóviles experimentaron solo días después de que algunos puntos de entrada se cerraron a raíz del 11-S.
Sin embargo, si Trump elige “cerrar” la frontera, señaló Alden, “la autoridad legal del presidente es bastante clara”.
“Ciertamente enfrentaría un desafío judicial, pero los tribunales realmente han reconocido la autoridad presidencial en esta área”.
La Oficina de Asesoría Jurídica del Departamento de Justicia comenzó a examinar la legalidad del cierre de la frontera sur después de que el presidente amenazó con un cierre de la frontera a través de Twitter en octubre y noviembre de 2018, según un funcionario del gobierno. No está claro por cuánto tiempo la oficina examinó el tema o si continúa investigando la legalidad de un cierre de la frontera dadas las amenazas más recientes del presidente. El Departamento de Justicia declinó hacer comentarios.
Jessica Schneider, Geneva Sands y Priscilla Alvarez de CNN contribuyeron con este informe.