(CNN) – Cuando Skirmantas Strimaitis reservó un boleto de ida al norte de Italia, nunca imaginó que sería el único pasajero a bordo.
Pero el ciudadano lituano, que volaba de Vilnius a Bergamo para un viaje de esquí el 16 de marzo, se sorprendió cuando descubrió que tenía todo el Boeing 737-800 para él solo.
Sus únicos compañeros a bordo del avión, que tiene capacidad para 189 personas, eran dos pilotos y cinco tripulantes.
Strimaitis sospechó que algo estaba mal cuando fue a registrarse en el Aeropuerto Internacional de Vilnius en Lituania y le dijeron que la tripulación lo estaba esperando.
Después de preguntar por qué, ya que no era tarde, Strimaitis fue informado de que él era el único pasajero a bordo.
El operador turístico Novaturas le confirmó a CNN Travel que alquilaron un vuelo de Bergamo a Vilnius para un grupo de clientes ese día.
Para evitar que la aeronave regresara vacía, se pusieron en venta boletos solo de ida se para el viaje de regreso.
Una experiencia única
Sin embargo, Strimaitis fue la única persona que compró un boleto, por lo que tuvo una experiencia que él describió como “única e irreal”.
“La tripulación parecía bastante confundida al principio”, le dijo a CNN Travel. “Tal vez también fue una nueva experiencia para ellos”.
Strimaitis dijo que recibió una demostración de seguridad previa al vuelo por parte del personal de seguridad.
“Entonces simplemente disfruté el vuelo tomando fotos y escribiendo. Tener silencio en un avión era muy inusual. Estuve sonriendo todo el día”, agregó.
Strimaitis compartió una selfie de sí mismo a bordo del avión desierto durante el viaje, que duró alrededor de dos horas.
El pasajero dijo que el piloto se refirió a él como “el señor pasajero” mientras hablaba por el altavoz después de que el avión aterrizara en el Aeropuerto Internacional Orio al Serio en Bérgamo.
“La tripulación dijo que era muy agradable tenerme a bordo”, explica. “Estoy seguro de que fue un trabajo fácil para ellos”.
Por supuesto, este no fue el primer caso en el que un pasajero adquirió inadvertidamente la experiencia en un avión privado.
Karon Grieve fue la única pasajera a bordo de un vuelo de Jet2 Airlines desde Glasgow a Creta en 2017.
La autora escocesa tuiteó una imagen de su experiencia y dijo que “se sentía como un pasajero VIP”.
Entre tanto, el año pasado, Beth VerSteeg voló desde Nueva York a Washington DC a bordo de un avión más o menos vacío después de que una aerolínea anónima aparentemente le reservó un puesto en un vuelo destinado exclusivamente para el personal.