(CNN) – Después de llegar a su Airbnb en Cork, Irlanda, una familia de Nueva Zelandia hizo un descubrimiento inquietante: una cámara oculta, que transmitía en vivo desde la sala de estar.
Nealie y Andrew Barker, de Auckland, estaban en medio de un viaje de 14 meses por Europa cuando llegaron a la propiedad Airbnb con sus cuatro hijos y su sobrina.
Una vez que la familia había desempacado, Andrew Barker, quien trabaja en seguridad IT, analizó la red Wi-Fi de la casa.
El escaneo puso al descubierto una cámara y, posteriormente, una transmisión en vivo. Desde el ángulo del video, la familia rastreó la cámara, oculta en lo que parecía ser una alarma de humo o un detector de monóxido de carbono.
“Fue un shock. Fue una sensación realmente horrible”, dijo Nealie Barker a CNN.
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Llamó a Airbnb para reportar la cámara. “No nos dieron ningún consejo por teléfono”, dijo. “La chica nos dijo que si cancelas no recuperarás tu dinero”.
Luego, Andrew Barker llamó al dueño de la propiedad. Cuando fue confrontado con el descubrimiento de la familia, dijo Nealie Barker, el anfitrión colgó. Más tarde, volvió a llamar, insistiendo en que la cámara en la sala de estar era la única en la casa.
“No nos sentimos aliviados con eso”, dijo, y agregó que el anfitrión se negó a confirmar si estaba grabando la transmisión en vivo o capturando el audio.
La familia se mudó a un hotel cercano y llamó a Airbnb al día siguiente. “Todavía no parecían entender la gravedad del problema. Lo estaban tratando como una reserva cancelada”, dijo Nealie Barker. En última instancia, el equipo de confianza y seguridad de Airbnb prometió realizar una investigación y suspendió temporalmente el anuncio.
Según Nealie Barker, Airbnb no volvió a contactar a la familia. Después de que ella se comunicó con ellos dos semanas después, la compañía le dijo que el anfitrión había sido “exonerado” y que el anuncio había sido reincorporado.
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Fue solo después de que ella publicó sobre el incidente en Facebook y las estaciones de noticias locales de Nueva Zelandia informaron de su experiencia, fue que el anfitrión fue permanentemente expulsado de la plataforma, dijo.
En una declaración Airbnb le dijo a CNN: “La seguridad y privacidad de nuestra comunidad, tanto en línea como fuera de línea, es nuestra prioridad. Las políticas de Airbnb prohíben estrictamente las cámaras ocultas en los anuncios y nos tomamos muy en serio las denuncias de violaciones. Hemos permanentemente a esta persona de nuestra plataforma”.
“Nuestro manejo original de este incidente no cumplió con los altos estándares que nos impusimos, y nos hemos disculpado con la familia y le hemos reembolsado completamente su estadía. Hasta la fecha, más de 500 millones de visitantes han llegado a casas anunciadas en Airbnb y los incidentes negativos son increíblemente raros”.
Aoife Mullen, gerente de comunicaciones de la Comisión de Protección de Datos de Irlanda, le dijo a CNN que la comisión estaba “al tanto del problema”, y agregó que “buscaremos más información de Airbnb sobre el asunto”.
La familia Barker está actualmente en Budapest, donde, Nealie Barker dijo: “Nos estamos quedando en un Airbnb en este momento”.
“Nos hemos vuelto mucho más cautelosos ahora”, dijo, aconsejando a otros viajeros que aprendan a escanear redes en busca de cámaras ocultas. “Creemos que la gente debe darse cuenta de que el mercado de los viajes no está regulado en gran medida y que si no está de acuerdo con ser filmado, debe tomar todas las medidas correctamente”.