(CNN) – Una persona murió y otras siguen desaparecidas tras la volcadura de una balsa en el Río Grande, durante un intento de traficantes de personas para que migrantes de México crucen a los Estados Unidos, según agentes.
Los agentes recibieron un reporte este miércoles por la noche de una balsa que volcó en el río en la región fronteriza de Del Río.
“Desafortunadamente, algunos de ellos fueron arrastrados cuando la balsa se volcó”, dijo un funcionario del Departamento de Seguridad Nacional. Otros lucharon por mantenerse a flote y mantener la cabeza fuera del agua, dijo el funcionario.
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Los agentes pudieron saltar al río y rescatar a algunas de las personas involucradas. Cinco fueron rescatadas y cuatro fueron inicialmente reportadas como desaparecidas. De las cuatro personas desaparecidas, una fue encontrada muerta.
Los esfuerzos de rescate continuaban hasta el jueves por la mañana.
“Cabe destacar que el año pasado, nosotros, CBP, estuvimos involucrados en los rescates de más de 4.300 personas”, dijo el comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza, John Sanders. “Las organizaciones criminales transnacionales son despiadadas”, agregó.
El funcionario del DHS dijo que la situación sigue siendo “inestable”. CBP está trabajando con aquellos que fueron rescatados y sobrevivieron para identificar a los desaparecidos.
Durante los esfuerzos de rescate, el funcionario dijo que los agentes escucharon “gritos provenientes del río” y que “resultaron ser de individuos que estaban varados y luchaban por mantenerse a flote”.
“El Río Grande es un río peligroso, parece tranquilo, pero ha generado una serie de rescates y muertes a lo largo de los años y es una de las principales formas en que los migrantes están en riesgo por el terreno y las barreras naturales que existen cuando se viaja al norte”, dijo el funcionario.
“Los rescates de este tipo aumentaron significativamente este año en comparación con el año pasado”, agregó el funcionario, y le dijo a CNN que en lo que va del año hay más de 200 casos de rescates desde el agua.
El funcionario señaló que el incidente pone de relieve el cambio en la demografía de los migrantes que llegan a la frontera sur de Estados Unidos, donde los niños y las familias con jóvenes pueden no ser capaces de resistir estas situaciones.
“Es trágico”, dijo el funcionario.
En general, las detenciones en la frontera son más altas de lo que han sido en más de una década, pero también es el cambio en la población lo que ha creado la situación de riesgo: de hombres solteros a familias y niños, principalmente de los países del Triángulo del Norte, compuesto por Guatemala, Honduras y El Salvador.