(CNN) – Brunei no impondrá la pena de muerte a las personas condenadas por tener relaciones sexuales con homosexuales, en un aparente intento de contener la condena internacional luego de su implementación de estrictas nuevas leyes islámicas el mes pasado.
En un discurso televisado el domingo, el gobernante del país, el sultán Hassanal Bolkiah, dijo que extendería una moratoria sobre la pena capital y que ratificaría la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura.
El anuncio se produce después de una reacción global contra el anuncio del país, hecho en abril, de que impondría nuevos castigos draconianos, incluida la muerte por lapidación, para los condenados por sexo gay, adulterio y violación.
En una campaña de alto perfil, celebridades como George Clooney y Elton John se unieron a grupos de derechos humanos para intentar boicotear los hoteles propiedad del sultán, mientras que grandes empresas como JPMorgan y Deutsche Bank dijeron a su personal que evitaran el uso de hoteles propiedad de Brunei, tras anunciarse las nuevas leyes.
El pequeño reino asiático rico en petróleo se convirtió en el primer país del este de Asia en acoger la ley sharía a nivel nacional en 2014, con la legislación y las penalidades asociadas aplicadas por etapas.
El país defendió inicialmente su nuevo código legal, afirmando que se enfocaba “más en la prevención y el castigo”, pero la creciente reacción parece haber forzado la decisión del reino.
En su discurso del domingo, el sultán dijo que había habido una serie de “conceptos erróneos” acerca de las leyes que, según reconoció, podrían haber causado “aprehensión”.
“Sin embargo, creemos que una vez que se hayan aclarado, el mérito de la ley será evidente”, dijo.
El sultán anunció que la moratoria a largo plazo del reino sobre la pena de muerte también se extendería al nuevo código penal, aunque no explicó si se trataba de una decisión nueva.
“Durante más de dos décadas, hemos practicado una moratoria de facto en la ejecución de la pena de muerte para los casos bajo la ley común. Esto también se aplicará a los casos bajo la Orden del Código Penal de Syariah (SPCO)”, dijo el sultán.
A pesar de su anuncio sobre la pena de muerte, el líder de Brunei dijo el domingo que seguía respaldando, en general, el nuevo código penal.
“Tanto el derecho consuetudinario como el derecho de la ley de Syaria tienen como objetivo garantizar la paz y la armonía del país. También son cruciales para proteger la moralidad y la decencia del público, así como para respetar la privacidad de las personas”, dijo.
Comunidad LGBT sigue en riesgo
Hubo un amplio alivio entre los activistas de derechos humanos y LGBT a raíz del anuncio. Sin embargo, las celebraciones se han silenciado hasta el momento, en medio de la preocupación de que las leyes se mantengan vigentes.
El director de alianza global de Human Rights Campaign, Jean Freedberg, dijo que la moratoria fue un paso importante, pero agregó que el nuevo código penal islámico debía desaparecer.
“El mundo ha puesto sus ojos en Brunei en los últimos meses e instamos a los innumerables defensores, activistas y organizaciones que aprovecharon este momento para denunciar estos abusos contra los derechos humanos a que sigan haciéndolo”, dijo.
Incluso si no fueran condenados a muerte, los ciudadanos LGBT de Brunei todavía podrían enfrentar multas, azotes o cárcel, dijo Matthew Woolfe, fundador de los grupos de derechos humanos The Brunei Project.
La ley aúnpende sobre las cabezas de la comunidad LGBT de Brunei, dijo Woolfe. “No hay nada que impida al Gobierno de Brunei levantar la moratoria en ningún momento”.
Chermaine Lee de CNN contribuyó a este artículo.