(CNN Español) – Un joven de 16 años perdió la vista tras ser herido con perdigones en su rostro por agentes de policía del estado Táchira, en el oeste de Venezuela, cuando esperaba la distribución de gas en su zona, informó el Ministerio Público.
Rufo Chacón Parada llegó junto a su madre, Adriana Parada, al punto de distribución de gas a las cuatro de la mañana del lunes. Tenían tres meses sin recibir gas. En el lugar habían familias, niños y adultos mayores,según relató Parada. Sin embargo, Parada cuenta que sin explicación alguna, la persona encargada de repartir el gas se negó a hacerlo, lo que desató el reclamo del grupo y que varias personas intentaran llevarse los contenedores de gas.
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Parada dice que un grupo de policías llegaron al lugar de manera violenta. Su hijo, Chacón Parada, pretendía llevarse dos contenedores de gas cuando la policía le disparó en la cara.
Chacón Parada fue trasladado de emergencia a un hospital en San Cristóbal. Luis Ramírez, Director de la Corporación de Salud del Estado Táchira, explicó que las heridas recibidas por el menor comprometieron ambos glóbulos oculares, ocasionando “la perdida total de la morfología y anatomía”. Ramírez agregó que debido a las lesiones, los glóbulos oculares debieron ser extraídos quirúrgicamente.
“Le cegaron la vida a mi hijo” dijo Parada y aseguró que “en el lugar no había guarimba, solo personas pidiendo gas”.
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El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, informó en su cuenta de Twitter que dos policías fueron detenidos por su presunta implicación en la agresión y que se designaron varios fiscales para los derechos humanos que “investigarán exhaustivamente” el incidente.
Según su madre, Chacón Parada debía graduarse este año de bachiller. “No sé qué voy a hacer con él. Quiero justicia. Que no los metan dos o tres meses en una celda por el privilegio de ser policías. Quiero justicia”, imploró Parada.
Osmary Hernández en Caracas contribuyó a este reporte.