(CNN Español) – En el marco de la celebración de los 40 años de la revolución sandinista, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, reiteró su compromiso con países como Cuba y Venezuela. Dijo que la solidaridad entre naciones “oprimidas por el imperio” debe primar sobre todo en marco político actual.
Ortega rechazó las sanciones que el gobierno de Estados Unidos ha impuesto no solo a Nicaragua sino también a los otros dos países. “Ningún Estado tiene la potestad de sancionar a otro Estado, el que actúa de esa manera está cometiendo delitos de índole internacional y es algo insostenible”, exclamó el mandatario nicaragüense.
Al evento asistieron miles de personas partidarias al Gobierno e invitados internacionales, entre ellos la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela Delcy Rodríguez, quien —sentada junto a su homóloga Rosario Murilllo— celebró al sandinismo.
Según Ortega, su Gobierno busca la paz y aclaró que el único diálogo que tiene sentido es aquel que mantiene con los sectores campesinos, artesanos y aquellos que buscan sacar adelante a Nicaragua.
Aseguró que en noviembre de 2021 su partido volverá a ganar las elecciones presidenciales y, de hecho, adelantó que harán “los ajustes necesarios” en la Constitución y la ley electoral para que cuando llegue el momento, según él, nadie se queje de que su partido se robó las elecciones.