Hong Kong (CNN Business) – Nissan advirtió el último trimestre que había “tocado fondo”. Ahora es todavía más claro que sus problemas no desaparecerán pronto.
El segundo mayor fabricante de automóviles de Japón dijo el jueves que prácticamente no tuvo ganancias en el primer trimestre de su año fiscal. La ganancia operativa cayó 99% en el trimestre en comparación con el año anterior.
Los ingresos, mientras tanto, cayeron casi un 13% en comparación con el año anterior.
Nissan dijo que recortará aproximadamente 12.500 empleos de su fuerza laboral en todo el mundo. Eso es más del doble de lo que la compañía esperaba recortar en mayo.
La compañía agregó que reducirá su línea de productos en al menos un 10% para fines del año fiscal 2022.
Nissan, al igual que otros fabricantes de automóviles del mundo, enfrenta graves desafíos. Una economía global lenta ha afectado las ventas y la guerra comercial entre Estados Unidos y China sigue siendo un gran riesgo para los fabricantes. Los nuevos estándares de emisión, impulsados en parte por la crisis climática, también han trastornado la industria.
Pero Nissan también está lidiando con problemas propios. Ha perdido participación de mercado en Estados Unidos y Europa, y todavía está tratando de superar el dramático arresto, el año pasado, de su expresidente Carlos Ghosn, cuyos problemas legales en Tokio están lejos de terminar.
Aunque ha rechazado los cargos en su contra, las acusaciones a Ghosn han ejercido una enorme presión sobre la alianza que creó entre Nissan, Renault y Mitsubishi Motors. Las tres compañías han renovado su compromiso con la asociación, pero las tensiones no han desaparecido.