(CNN) – Las fotos del fatal accidente automovilístico del fallecido actor James Dean, que fueron usadas en el tribunal, irán a una subasta en agosto y se espera que recauden 20.000 dólares.
El actor de 24 años conducía hacia el oeste por la ruta 466 en California, con destino a un evento de carreras en Salinas, el 30 de septiembre de 1955, cuando su Porsche 550 Spyder de 1955 chocó con un Ford Tudor de 1950 conducido por un veterano de la Marina, Donald Turnupseed. En el asiento del pasajero de Dean estaba su mecánico de Porsche, Rolf Wütherich, quien sobrevivió al accidente.
“La muerte prematura de James Dean reaparece hasta el día de hoy”, dijo Bobby Livingston, vicepresidente ejecutivo de RR Auction. “Estas imágenes ofrecen una perspectiva intensamente única de la ubicación del accidente y la resultante carnicería. Muchas de las fotos fueron tomadas solo unas horas después del accidente”.
De acuerdo con RR Auction, la colección de fotos en blanco y negro consta de 12 vistas aéreas de la intersección donde ocurrió el accidente y 18 fotos “a nivel del suelo”, nueve de las cuales tienen más detalles de cerca de las secuelas del accidente y de los vehículos destrozados.
Seis de las fotos tienen vistas interiores y exteriores del Porsche de James Dean. Su número de competencia, 130, se muestra prominentemente en la parte posterior junto con una calcomanía con la leyenda “Little Bastard” (“Pequeño bastardo”.
En la parte posterior de las fotos a nivel del suelo, está escrito “Wütherich vs. Turnupseed-Dean-Coulter” a lápiz, refiriéndose al intento de Wütherich de demandar a las compañías de seguros de Dean y Turnupseed por una doble mandíbula fracturada y una izquierda muy desgarrada cadera que requirió múltiples cirugías, según RR Auction.
El proceso legal nunca llegó a buen término: Wütherich regresó a Alemania Occidental en 1957.
También hay una carta de procedencia firmada de Robert A. Coyle, el hijo de Robert Everett Coyle, quien se desempeñó como abogado de Turnupseed y su compañía de seguros.
“Cuando se retiró el caso, él todavía estaba en posesión de las fotografías y como aficionado a la historia, se aseguró de que no fueran destruidas”, dice la carta.
El destrozado Porsche realizó una gira nacional como exhibición de seguridad vial, pero desapareció mientras lo transportaban de Florida a California, según WLS, afiliada de CNN.
El Volo Auto Museum fuera de Chicago ofreció una recompensa de un millón de dólares por los restos y le dijo a WLS que recibió una sugerencia creíble sobre el paradero de Porsche en 2014.
El hombre “dijo que tenía 6 años en ese momento y estaba presente, así como su padre y otros hombres que pusieron los restos detrás de un falso muro en un edificio en el condado de Whatcom, Washington”, dijo el director del museo, Brian Grams.
Grams dijo en 2015 que el hombre pasó una prueba de polígrafo con respecto a los detalles de su historia, pero no quería revelar dónde estaba el edificio hasta que firmó un acuerdo por una parte del dinero de recompensa del museo. El museo pagaría ese dinero de recompensa solo si obtuviera la propiedad legal del Porsche, según WLS. Sin embargo, los restos siguen desaparecidos.