(CNN Español) – “Soy de letras y mar”. Así se describe la escritora Patricia Fernández Montero, de 21 años. Es una definición más compleja que decir que es estudiante de Periodismo y Comunicación Audiovisual, activista por los derechos de la infancia y escritora. Para Fernández Montero, la literatura es “una vía de escape, de desconexión y al mismo tiempo conexión con uno mismo, también de éxtasis”.
A pesar de su corta edad, Fernández Montero ha publicado dos libros: “Ya no tengo miedo” y “Antología del amor”. El primero de ellos vio la luz cuando tenía apenas 17 años. Ella afirma que tiene la impresión que de pequeñita empezó a escribir antes que a hablar. “Las letras (para mí) eran como para otros niños el fútbol”, dice.
El corazón a mil lágrimas por segundo
sírvase otra, esta noche no se duerme
la vergüenza más corta que la falda
esta botella llevaba escrita en la cinta mi nombre
camarero, dígale que más por vieja que por diabla
que no sé, que no
que solo inventaba
no sabe llorar, no le quedan lágrimas
no sabe amar, no le sobran años
y el corazón a mil puñaladas por segundo.
Fernández Montero habla de Federico García Lorca o suelta una de sus frases a la menor ocasión en una conversación. Aunque afirma no tener un libro favorito de momento, si tuviera que escoger, sería sin duda uno de Lorca, el famoso poeta, dramaturgo y prosista español del siglo XX.
“Lorca decía que a un hombre antes de darle pan hay que darle un libro, porque llena el alma”.
Sobre el valor y la inspiración
Fernández Montero es un ejemplo de los muchos jóvenes talentos que persiguen sus sueños. Tuvo la suerte de que a los 17 años una editorial apostara por ella. Los libros siempre han estado en su vida y no lo concibe de otra manera; sin ellos “no valdría la pena”, dice. La relación de la joven escritora con la literatura es tan intensa que afirma querer hacerlo oficial: “Para mí la literatura es con quién me quiero casar”.
Escribir le da vida, explica, y es por eso que sin esperar nada a cambio, desde hace un año “regala”, como ella dice, sus letras al mundo a través de su blog. Esta escritora, además, usa su literatura para hacer denuncia social, y hablar sobre política. Su primer libro se basa en su propia historia como víctima de violencia de género en la infancia con el objetivo de sacar a la luz una desgarradora realidad que muchos niños sufren.
La humanidad de la literatura
Fernández Montero es rebelde, como la mayoría de los artistas, y no lo esconde. Tampoco le importa mostrar sus debilidades y sabe que parte de su intimidad es pública. De hecho, lo cree necesario. Según la escritora, la sociedad nos prepara para ser fuertes, para mostrar la cara feliz de las cosas, a que todo sea pulcro y ordenado. Pues ella intencionadamente puso de patas arriba ese ideal con su segundo libro. “Con “Antología del Amor” os vais a enterar de lo que sufrí yo”, dice con picardía.
Ojos verdes
Dulce risa
Brilla tu luz
Mi piel erizas.
Pulida piel
Por cien lunares
Vestigio de tus besos
Litigio de mis males.
Salvaje interior
Cielo de mil gaviotas
Cáliz de mis recuerdos
Que dejaste a cuentagotas.
En otra playa ahora descanso
Pero mi mar sigue contigo
De tu arena sigo manchada
De tus besos llevo el testigo.
La escritora afirma que la filosofía, el concepto del tiempo y la retrospección son su inspiración. No obstante, explica, la inspiración no entiende de horarios. Quizás son las tres de la madrugada y agarra un bolígrafo y su libreta. Quizás es mientras está con amigos o familia y una idea llama a la puerta. No hay otra opción que abandonar el lugar y ponerse a escribir lo que se le pasa por la cabeza, dice. Qué pena que no pueda hacer eso durante el trabajo, se lamenta.
Fernández Montero ya tiene su tercer libro en camino.