(CNN) – La sequía que afecta a Honduras ha provocado la muerte de más de mil cabezas de ganado y al desabastecimiento de agua para el consumo humano, según datos de la Secretaría de Agricultura y Ganadería.
Ante la falta de lluvia por la canícula extendida producto del fenómeno de El Niño, el gobierno decretó emergencia por sequía el pasado 5 de septiembre.
La falta de agua es tan grave que ya se reportan enfrentamientos entre la Policía Nacional y pobladores que pretenden detener la construcción de un complejo habitacional en una reserva natural que, según dicen, afectaría al 30 por ciento de quienes viven en Tegucigalpa, capital hondureña.
El bajo nivel de las únicas dos represas que abastecen de agua a más de 1,2 millones de capitalinos, según datos oficiales, llega al extremo que en determinados sectores sólo reciben el servicio cada 45 días.
Es en las zonas altas, donde el agua por tubería no llega hasta las viviendas, “no hay agua”, se lamenta Manuel Salgado, quien tiene que comprar un barril de 159 litros de agua a unos tres dólares para suplir sus necesidades.
Esa cifra resulta alta para el hondureño, que en promedio tiene un salario de 356 dólares mensuales, según datos del Banco Mundial.
Ese alto costo es reconocido por el presidente Juan Orlando Hernández: “Es una situación difícil, es impactante cuánto paga la gente cuando es escasa el agua, y el que más paga es el pobre”, aseguró.
Esa erogación se agrava para los vendedores de los mercados, como Luz Idalia Macareño, quien asegura que en el mercado San Miguel de Tegucigalpa, que administra, hay que evitar riesgos sanitarios porque “si no hay agua hay que cerrar.”
Pequeños negocios, como la lavandería que gerencia Ana Carías, ven mermada la cantidad de pedidos, pues “hay clientes que se van a otros, deciden dejar su ropa para dos tres días pero hay clientes que no y eso es una pérdida para nosotros”, apuntó.
Frente al reclamo ciudadano, las autoridades de la Alcaldía encargadas del suministro de agua dicen que muy poco pueden hacer, pues según el regidor municipal Juan Carlos García “si no llueve en los próximos días pueden alargarse los racionamientos”.
Ante ese panorama nada alentador, el alcalde capitalino Nasry Azfura pide a la población “rezar” para que lleguen las lluvias al tiempo que anuncia la construcción de dos nuevas represas para abastecer a los 1.259.903 habitantes de la capital, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas.
Los meteorólogos indican que la falta de lluvia en Tegucigalpa se debe a la extensa canícula producto del fenómeno de El Niño que dejó un invierno irregular, y aseguran que si no llueve en los próximos 15 días la crisis por el abastecimiento de agua en la capital se agudizará más de lo que ya está.