(CNN) – El presidente Donald Trump anunció el lunes que Estados Unidos “restablecerá” los aranceles para el acero y aluminio de Brasil y Argentina, citando una “devaluación masiva de sus monedas”.
“Brasil y Argentina han estado encabezando una devaluación masiva de sus monedas. Lo cual no es bueno para nuestros agricultores. Por lo tanto, con vigencia inmediata, restableceré los aranceles sobre todo el acero y aluminio que se envía a Estados Unidos desde esos países”, tuiteó Trump este lunes a primera hora desde Washington.
Los avisos formales de los aranceles no fueron anunciados de inmediato por el Departamento del Tesoro o Comercio o la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo este lunes que usará el “canal abierto” que tiene con el presidente estadounidense Donald Trump para hablar sobre su decisión de restaurar los aranceles a las importaciones de acero y aluminio brasileño, informó Agencia Brasil.
Agencia Brasil también reportó que Bolsonaro afirmó que el tema será tratado este lunes por el ministro de Economía, Paulo Guedes.
“Hablaré con [Paulo] Guedes ahora, y si corresponde, llamaré a Trump porque tengo un canal abierto con él”, dijo el presidente durante un evento donde se presentaron las acciones ya tomadas por un banco estatal en beneficio de personas con discapacidad.
Tanto Brasil como Argentina quedaron exentos del 25% de los aranceles de acero y aluminio el año pasado cuando Trump intentaba evitar una guerra comercial con esos países.
Trump se enorgullece de imponer aranceles y negociar acuerdos comerciales para reforzar su agenda económica “Estados Unidos Primero”. Pero el acuerdo más importante en el centro de la guerra comercial, un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, aún no se ha firmado. Se espera que los aranceles adicionales a las importaciones chinas entren en vigencia el 15 de diciembre.
A medida que China, ahora el principal productor mundial de acero, ha incrementado su producción de acero, los empleos de acero en Estados Unidos han disminuido. El presidente prometió revitalizar los empleos de acero en Estados Unidos, pero el año pasado la industria del acero agregó 2.400 empleos, un aumento de poco más del 1%. El empleo en la industria todavía ha disminuido aproximadamente un 43% desde 1990.
El ministro de Producción y Trabajo de Argentina, Dante Sica, dijo que el anuncio de Trump fue algo “inesperado”.
“Fue un tema inesperado, no existía ninguna señal ni hacia nuestro gobierno, ni hacia el de Brasil, ni al sector privado, respecto a cambios en el acuerdo con Estados Unidos”, dijo Sica en declaraciones a la agencia Télam.
Sica indicó que una vez conocido el tuit de Trump se reunió “inmediatamente” con el canciller Jorge Faurie para “analizar el curso de acción”.
“A partir de ese tuit nos reunimos con el canciller Faurie y estamos trabajando tratando de tener más precisiones, incluso hemos llamado a la embajada de Estados Unidos”, agregó. “Estamos activando todos nuestros contactos en Washington para tener alguna precisión más. No sabemos cuál es la magnitud de esa declaración ni cómo impacta en los acuerdos vigentes”, explicó Sica.
Añadió que “en el sector privado estaban en ascuas con respecto a esto y ya empezaron a evaluar el impacto sobre niveles de producción, a la vez que activan sus contactos internacionales con las cámaras representativas”.
“En el caso que esto cambie las condiciones del acuerdo vamos a evaluar el impacto que podría tener en nuestro comercio para el año que viene, contemplando que las exportaciones de acero y aluminio rondan los US$ 700 millones anuales”, concluyó Sica.
La devaluación de las monedas
El presidente, en una serie de tuits en los que anunció el restablecimiento de los aranceles, también pidió a la Reserva Federal que “actúe para que los países, de los cuales hay muchos, ya no aprovechen nuestro dólar fuerte al devaluar aún más sus monedas”.
Tanto Argentina como Brasil se han beneficiado de las relaciones comerciales más cálidas con Estados Unidos bajo Trump como resultado de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, pero los dos países han visto caer recientemente los valores de sus monedas. El real brasileño ha caído más del 8% frente al dólar este año, y el peso argentino ha bajado un 37%. Eso es más que otras monedas importantes de los mercados emergentes, incluido el rand sudafricano, el peso mexicano y el won surcoreano. La lira turca también ha bajado un 8% este año.
Estados Unidos ha comprado más acero de Brasil que cualquier otro país además de Canadá durante los primeros nueve meses de este año, lo que representa casi el 11% de todas las importaciones de acero, según datos de la Oficina del Censo. Depende mucho de Argentina para el acero, que representa menos del 1% de las importaciones.
Pero ambos países se están beneficiando de la guerra comercial de Trump con China, que ha perjudicado a los agricultores estadounidenses. Brasil es el segundo mayor productor de soja del mundo, y es donde los agricultores de China han estado obteniendo gran parte de su soja desde que Beijing impuso aranceles de represalia a la agricultura estadounidense. Recientemente, Argentina hizo un trato con China que le permitirá importar harina de soya a partir del próximo año.
Durante la visita del presidente brasileño Jair Bolsonaro a la Casa Blanca a principios de este año, Trump anunció que Estados Unidos designaría a Brasil como un aliado no perteneciente a la OTAN. Y recientemente, un comunicado conjunto del Foro de CEOs de EE. UU. y Brasil a fines de noviembre describió recomendaciones conjuntas para mejorar la relación económica entre los dos países.
La declaración en el foro, a la que asistió el Secretario de Comercio de los Estados Unidos, Wilbur Ross, Director del Consejo Económico Nacional de los Estados Unidos, Larry Kudlow, no insinuó ningún cambio en el estado de la exención arancelaria del acero de Brasil.
– Alessandra Castelli, Katie Lobosco y Anneken Tappe de CNN contribuyeron a este informe.