(CNN Español) – El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, pidió al Consejo de Gabinete que apruebe de inmediato la solicitud de retirar el proyecto de ley de reformas constitucionales. En octubre pasado, esa propuesta generó protestas y disturbios en las calles.
El Consejo de Gabinete aprobó la tarde de este lunes la resolución de la propuesta a la Asamblea Nacional el retiro del proyecto.
La intención, según dice la declaración es “con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), iniciar un amplio diálogo nacional, que permita tener listas para el año 2021 las modificaciones que se requieren para los tres órganos del Estado”.
“Escuchando la voluntad de diferentes actores, y cuando digo escuchando es muchísimas horas que le dediqué a estudiantes de universidades oficiales, particulares, trabajadores organizados, profesionales, medios, y en coordinación con la Asamblea Nacional, el Ejecutivo le puede llevar hoy al Consejo de Gabinete, le va a estar solicitando el retiro a la Asamblea Nacional de las reformas constitucionales para abrir bajo la facilitación del PNUD un amplio diálogo nacional, inclusivo y ordenado”, explicó el mandatario.
El anuncio inicial de Cortizo se hizo durante la firma de un acuerdo con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que tiene como objetivo diseñar y desarrollar el diálogo por las reformas constitucionales.
Tras el anuncio, la Asamblea Nacional reiteró su disposición al diálogo y la búsqueda de un gran consenso que dé como resultado un texto de reformas acorde a las necesidades del país.
Por su parte, Genaro López, secretario general de la Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente (CONUSI), dijo en conferencia de prensa: “Nosotros no avalamos lo que está diciendo el Ejecutivo, que sea como mediador el PNUD… Nosotros estamos planteando que se convoque a una constituyente originaria, que se convoque a los sectores populares, pero tiene que ser una constituyente originaria para que acabe con la corrupción que existe en el país “.
En los artículos 313 y 314 de la Constitución de Panamá se establecen tres métodos para aplicar cambios a la carta magna. Uno es a través de un proyecto de reformas aprobado en dos períodos presidenciales; otro, por medio de dos legislaturas y la realización de un referéndum; y un tercero, por una constituyente paralela, que permite que los órganos del Estado y autoridades electas sigan funcionando.
Sin embargo, algunos grupos sociales, como CONUSI, quieren que se haga una constituyente originaria, que no es mencionada explícitamente en la Constitución, pero que implica que se frene la estructura estatal y haya una especie de borrón y cuenta nueva.
A pesar del rechazo popular, el paquete de reformas constitucionales ya había sido aprobado en una primera legislatura de la Asamblea Nacional. El anuncio del presidente Laurentino Cortizo se produce a sólo días de que se iniciara la discusión en una segunda legislatura.
El plan es que luego de las dos legislaturas aprobadas, la propuesta se sometiera a un referéndum, que según el Tribunal Electoral costaría 19 millones de dólares, y al cual algunos sectores sociales del país promovían el voto de rechazo.