Raleigh, Carolina del Norte (CNN Business) – Los restaurantes chinos están en serios problemas en Estados Unidos.
Al 15 de abril, el 59% de los restaurantes chinos independientes en todo Estados Unidos habían dejado de realizar transacciones con tarjetas de débito y crédito, lo que indica que han cesado sus operaciones, según Womply, un servicio de suscripción de datos. Womply rastrea las transacciones con tarjeta de crédito y débito para proporcionar información del mercado a 10 millones de pequeñas empresas.
Los restaurantes en todo Estados Unidos están sufriendo debido al cierre de negocios por la pandemia, pero los restaurantes chinos son, con mucho, el segmento más afectado de la industria, informó Womply.
Muchos restaurantes chinos no sobrevivirán a la pandemia del coronavirus sin una intervención específica del gobierno, advierten los defensores.
Antes del brote de coronavirus, 270 restaurantes operaban en el barrio chino de Nueva York, según Wellington Chen, director ejecutivo de la Corporación de Desarrollo Local de la Asociación del Barrio Chino de Manhattan. Solo 40 permanecen abiertos, dijo Chen a CNN Business el viernes.
Una gran cantidad de restaurantes chinos en Chinatown de San Francisco han cesado sus operaciones de manera similar, según Malcolm Yeung, director ejecutivo del Centro de Desarrollo Comunitario de Chinatown de la ciudad. Yeung, que también se desempeña como miembro de la junta de la Cámara de Comercio china local, dijo que el Barrio Chino de San Francisco generalmente tiene alrededor de 150 restaurantes chinos en el negocio, pero ahora solo 40 permanecen en funcionamiento.
Aunque los restaurantes chinos en todo el mundo se han convertido en sinónimo de comida para llevar y para pedir a domicilio, muchos restaurantes chinos tradicionales solo ofrecen servicio de cena en el restaurante. Yeung y Chen señalaron que muchos restaurantes chinos tradicionales en los distritos de Chinatown de las principales ciudades rechazan los servicios de entrega como GrubHub, porque esos servicios cobran tarifas altas.
“Estos [restaurantes chinos] ya tenían márgenes operativos delgados antes”, explicó Yeung. “La transición [a la tecnología] de entrega los hará aún más delgados”.
Chen dijo que espera que los restaurantes chinos reciban fondos y programas de ayuda específicos del gobierno local, estatal y federal. “Si no conseguimos las ayudas, no podemos alcanzar el equilibrio”, dijo Chen.
Se espera que el Congreso apruebe un acuerdo para reponer el Programa de Protección de Cheques de Pago del gobierno federal, que el mes pasado agotó rápidamente su fondo de rescate económico de US$ 349.000 millones para pequeñas empresas. Algunos de esos fondos se destinarán a empresas desatendidas, incluidas las administradas por minorías.
Una gran parte de los restaurantes chinos de la nación son independientes y carecen de las reservas de capital de las cadenas corporativas, que pueden estar mejor posicionadas para resistir la tormenta financiera del coronavirus, dijo un portavoz de PF Chang, que tiene más de 200 restaurantes estadounidenses.
El portavoz dijo que el negocio de comida para llevar y a domicilio de la cadena asiática ha “duplicado su tamaño” desde mediados de marzo.
“Afortunadamente, el modelo con el que todos los tipos de restaurantes en nuestro país deben operar actualmente es uno que conocemos bien y en el que somos excepcionalmente buenos”, dijo un portavoz de PF Chang por correo electrónico.