(CNN) – Algunos los han apodado “hipóxicos felices”. Es un nombre bastante inapropiado para lo que podría ser una recuperación larga y lenta, o incluso algo peor.
Se trata de los pacientes que tienen “hipoxia silenciosa”, un peligroso efecto del coronavirus que no te produce falta de aliento.
Esto es lo que debes saber:
¿Que es la hipoxia?
Hipoxia es un término para describir la falta de oxígeno en la sangre.
“Significa la presencia de un nivel de oxígeno inferior a lo normal en la sangre”, explica la Clínica Mayo.
La saturación normal de oxígeno en la sangre oscila entre 95% y 100%, y cualquier nivel por debajo del 90% se considera anormal.
“Cuando respiramos el aire lleva oxígeno de la atmósfera a nuestros pulmones, y en los pulmones entra el oxígeno a la sangre y sale el dióxido de carbono, el famoso intercambio gaseoso. El oxígeno es vital para el ser humano y existe un mecanismo cerebral que controla el nivel de oxígeno, de lo que se llama saturación. Va entre el 95 y 96 por cierto, nunca llega a 100”, explica el doctor Elmer Huerta, oncólogo y especialista en salud pública, y colaborador de CNN en Español.
El doctor dice que si por alguna enfermedad o condición o porque en el ambiente no hay suficiente oxígeno, no llegará a la sangre y la saturación puede caer.
“Cuando tu cerebro se da cuenta de que tus glóbulos rojos no tienen oxígeno, lanza la alarma y la persona se ahoga, está inquieta porque no tiene oxígeno”, añade Huerta.
Entonces, ¿hay quienes no presentan síntomas?
Exactamente. Huerta dice que no tiene aún una explicación adecuada. Hay unos pocos casos de pacientes con coronavirus, explica Huerta, que tienen saturación de 85 u 84 por ciento “y están revisando su celular, no se dan cuenta de que su cuerpo está en hipoxia”.
“Se piensa que es un daño cerebral, como si el sensor se hubiera estropeado y no detecta el nivel de hipoxia. Otra teoría dice que los glóbulos rojos no están llevando el oxígeno”, añade.
El Dr. Richard Levitan, quien ha sido médico de emergencias durante unos 30 años, recientemente pasó casi dos semanas como voluntario en la sala de emergencias de un hospital de la ciudad de Nueva York, cerca del epicentro del devastador brote de la ciudad.
Allí observó a pacientes entrar a la sala de emergencias con niveles de oxígeno en la sangre muy bajos, hasta del 50%, lo que debería haber causado que estuvieran incoherentes, incluso inconscientes.
¿A quién le puede ocurrir?
Huerta explica que le pasa al 5% de los casos de coronavirus y se presenta en la segunda semana de la enfermedad.
Por lo general, estos pacientes han experimentado algunos síntomas de covid-19 entre 2 y 7 días antes de ir al hospital, con quejas de opresión repentina en el pecho o incapacidad para respirar profundamente, indicó el Dr. Levitan
¿Por qué es peligrosa?
Levitán dijo que las tomografías de los pulmones de estos pacientes revelaron signos de neumonía tan severa que deberían padecer un dolor terrible mientras buscan respirar.
“Sus rayos X se veían horribles, su oxigenación era terrible y, sin embargo, están completamente despiertos, alertas en un teléfono celular, y todos dijeron que habían estado algo enfermos durante días”, relató.
“Y entonces solo recientemente notaron falta de aliento o fatiga o algo más”, agregó Levitan. “Eso es lo que es tan fascinante de esta enfermedad, y también tan terrible”.
Es horrible porque cuando una persona se da cuenta que está teniendo problemas para respirar profundo y decide buscar ayuda, ya está peligrosamente enferma.
“Algunos, en última instancia, pueden requerir un respirador artificial”, señaló Levitan. “A medida que aumentan los niveles de dióxido de carbono, se acumula líquido en los alvéolos y los pulmones se vuelven rígidos, lo que lleva a una insuficiencia respiratoria aguda”.
Es posible que las personas no sean conscientes de que su ritmo de respiración va más rápido y no busquen ayuda, pero los niveles de oxígeno en la sangre continúan disminuyendo. Mientras tanto, el cuerpo se ajusta lentamente a la reducción en el oxígeno, algo muy parecido a lo que sucede cuando una persona viaja a una altitud superior a la que está acostumbrada.
Para cuando estos pacientes llegan al hospital con los pulmones deteriorados y los niveles de oxígeno muy bajos, “esto ha estado ocurriendo por un tiempo”, indicó Rutland. “Entonces tu cuerpo está de alguna manera acostumbrado”, explicó.
Sin embargo, el daño ya ha ocurrido. No solo los pulmones están gravemente devastados, sino que también la falta de oxígeno pudo haber comprometido a otros órganos del cuerpo, como el corazón, los riñones y el cerebro.
Una hipoxia silenciosa que avanza rápidamente a una insuficiencia respiratoria puede explicar por qué algunos pacientes jóvenes con covid-19, sin ninguna condición de salud preexistente, han muerto repentinamente después de no experimentar ninguna dificultad respiratoria grave.