Hong Kong (CNN) – La legislatura de China aprobó una propuesta para imponer una ley de seguridad nacional altamente polémica en Hong Kong, una medida sin precedentes que, según los críticos, amenaza las libertades políticas fundamentales y las libertades civiles en el territorio semiautónomo chino.
El oficialista Parlamento del país —el Congreso Nacional del Pueblo (APN)— aprobó casi que de manera unánime la resolución, este jueves, para introducir la amplia legislación de seguridad, que prohíbe la secesión, la subversión del poder estatal, el terrorismo, la intervención extranjera y permite a las agencias de seguridad del Estado de China continental operar en la ciudad.
Solo un delegado votó en contra de la propuesta, mientras que 2.878 votaron a favor y seis se abstuvieron.
Ahora aprobado, el Comité Permanente del APN redactará la ley, un proceso que se espera que tome alrededor de dos meses. Luego se implementará tras la promulgación del Gobierno de Hong Kong, evitando la legislatura de la ciudad a través de una puerta constitucional raramente promulgada.
La ley ampliará drásticamente el poder de Beijing sobre Hong Kong, que el año pasado se vio afectado por las protestas antigubernamentales por una mayor democracia y más autonomía de China continental.
La semana pasada, las noticias de la propuesta se encontraron con una resistencia inmediata en la ciudad, con manifestantes que salieron a las calles y se enfrentaron con la policía. Se espera que la aprobación de la ley dé como resultado más manifestaciones masivas, con líderes de las protestas que prometen oponerse a una mayor influencia del Gobierno chino a cualquier costo.
El primer ministro de China, Li Keqiang, dijo, este jueves, después de las reuniones parlamentarias, que la ley fue diseñada para la “implementación constante de ‘un país, dos sistemas’”, una fórmula que garantiza a Hong Kong su autonomía y libertades, y para “la prosperidad y estabilidad de Hong Kong al largo plazo”.
Pero eso no ha logrado tranquilizar a los críticos. La medida ha sido denunciada internacionalmente, y los opositores advierten que podría reducir muchas de las garantías legales prometidas a la ciudad cuando fue entregada por el Gobierno británico al chino, en 1997.
Claudia Mo, legisladora en favor de la democracia, dijo que la decisión marca “el comienzo de una era triste y traumática para Hong Kong”.
“Prácticamente nos han quitado el alma. Nuestra alma que hemos estado atesorando todos estos años, el imperio de la ley, los derechos humanos; nos están quitando todos los valores fundamentales que hemos llegado a conocer”, dijo.
“De ahora en adelante, Hong Kong no es más que otra ciudad de China continental”.
La situación especial
Después de las protestas en la ciudad, el miércoles, en las que alrededor de 300 personas fueron arrestadas, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo que su país ya no consideraría el centro financiero global como autónomo de China para fines comerciales y económicos.
En un comunicado, Pompeo denunció la ley como una “decisión desastrosa” y “la última de una serie de acciones que socavan fundamentalmente la autonomía y las libertades de Hong Kong”.
“Ninguna persona razonable puede afirmar hoy que Hong Kong mantiene un alto grado de autonomía de China, dados los hechos sobre el terreno”, dijo Pompeo.
En virtud de la Ley de Derechos Humanos y Democracia de Hong Kong, aprobada el año pasado en apoyo de las protestas a favor de la democracia en el territorio, el Gobierno de Estados Unidos debe verificar anualmente ante el Congreso que la ciudad sigue siendo autónoma de China, o corre el riesgo de perder su estatus especial con Estados Unidos.
El estado comercial y económico especial de Hong Kong con Estados Unidos lo exime de los aranceles y controles de exportación impuestos por Washington a China continental.
No está claro de inmediato qué repercusiones traerá el anuncio de Pompeo. Hong Kong ha servido durante mucho tiempo como un centro regional para muchas empresas internacionales, así como un trampolín para que las empresas chinas se expandan internacionalmente.
El Consulado General de Estados Unidos en Hong Kong dice que representa a más de 1.200 compañías estadounidenses que hacen negocios allí; más de 800 son oficinas regionales o sedes.
Un asesor del Congreso le dijo a CNN que la certificación no activa automáticamente la acción y que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, determinará los próximos pasos.
David Stilwell, el principal diplomático de Estados Unidos en la Oficina de Asuntos de Asia Oriental y el Pacífico, dijo que los funcionarios estaban buscando opciones “en todo el espectro”, incluidas las visas o las sanciones económicas.
Los expertos estadounidenses dicen que las consecuencias podrían ser mucho más amplias, como poner fin al tratado de extradición entre Estados Unidos y Hong Kong.
Enfurecer a Beijing
Es probable que el anuncio de Estados Unidos enfurezca a Beijing y afecte aún más las relaciones entre las dos partes, luego de disputas sobre la pandemia de coronavirus y una prolongada guerra comercial.
El Gobierno chino aún no ha respondido a la declaración de Pompeo, que se publicó después de la medianoche hora de Beijing. Pero el Ministerio de Relaciones Exteriores del país prometió anteriormente responder a cualquier “intervención externa”.
“La legislación sobre la defensa de la seguridad nacional en Hong Kong es puramente un asunto interno de China que no permite la interferencia extranjera”, dijo, el miércoles, el portavoz del ministerio, Zhao Lijian, cuando se le preguntó sobre una posible respuesta fuerte de Washington a la ley.
“En respuesta a las prácticas erróneas de intervención externa, tomaremos las contramedidas necesarias”, dijo Zhao.
El jefe de redacción del Global Times, un tabloide nacionalista controlado por el Gobierno, arremetió contra Washington el jueves y lo acusó de ser “demasiado narcisista” al pensar que podría “captar el destino de Hong Kong en sus manos”.
“La única carta en manos estadounidenses es el estado arancelario especial de Hong Kong, y los chinos lo han estudiado a fondo. Si Washington quiere jugar esta carta, que la juegue … Hong Kong es la fuente del mayor superávit comercial de Estados Unidos, con 85.000 ciudadanos estadounidenses viviendo allí.. Veamos cómo Estados Unidos se tragará el amargo fruto de cancelar el estado arancelario especial de Hong Kong”, escribió Hu Xijin, en una publicación desafiante en Weibo.
Según el Gobierno de Hong Kong, Estados Unidos tenía un superávit de US$ 31.100 millones en el comercio de mercancías sobre Hong Kong, en 2018, la única economía con la que tienen el mayor superávit comercial.
“El mayor pilar para que Hong Kong siga siendo un centro financiero internacional es su relación especial con la gran economía de la parte continental de China… La fuerza de China dicta que debe haber un centro financiero internacional en nuestra costa, y será allí donde los chinos quieren que así sea”, dijo Hu en la publicación de Weibo.
– James Griffiths, Jennifer Hansler, Nicole Gaouette y Kylie Atwood de CNN contribuyeron con este reporte.