(CNN) – Tres policías del Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York fueron dados de alta del hospital después de enfermarse cuando bebieron batidos de Shake Shack el lunes por la noche.
Las malteadas pueden haber sido contaminadas con cloro, según un comunicado de la Asociación de Beneficencia de la Policía de Nueva York.
La policía de Nueva York lanzó una investigación después de que los agentes se enfermaron y determinaron la madrugada del martes que no hubo un crimen por parte de los empleados, según un tuit del jefe de detectives de la policía de Nueva York, Rodney Harrison.
Los investigadores creen que una solución utilizada para limpiar las máquinas de malteadas no se eliminó por completo y puede haber entrado en las bebidas de los policías.
Los agentes compraron las bebidas en la ubicación de la cadena de restaurantes en el bajo Manhattan alrededor de las 8:30 p.m., dijo una portavoz del departamento.
Los tres policías fueron transportados a un hospital local donde fueron tratados, observados y dados de alta, según la portavoz.
El NYCPBA, que representa a más de 50.000 policías activos y retirados, dijo en un comunicado publicado en Twitter el lunes por la noche que los agentes “descubrieron que una sustancia tóxica, que se cree que era lejía, había sido colocada en sus bebidas”.
Los policías ya habían ingerido parte de las bebidas cuando notaron que había una sustancia en sus bebidas, según el comunicado.
“Cuando los agentes de policía de Nueva York ni siquiera pueden comer sin ser atacados, está claro que el entorno en el que trabajamos se ha deteriorado a un nivel crítico”, escribió el presidente de la PBA, Patrick Lynch.
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Shake Shack dijo en un tuit el lunes por la noche que estaban “horrorizados por los informes de agentes afectados” y que estaban trabajando con la policía en la investigación.
En un tuit actualizado el martes por la mañana, la cadena de hamburguesas dijo que estaban “aliviados de escuchar que los policías están bien” y que “están trabajando duro para obtener una imagen completa”.
CNN ha pedido más comentarios al restaurante, pero aún no ha recibido respuesta.
Brynn Gingras de CNN contribuyó a este informe.