(CNN) – Covid-19 fue lo último en lo que pensó cuando fue a un bar lleno de gente en Scottsdale, Arizona, dijo Jimmy Flores.
“Estábamos en cmaino a la reapertura, y realmente no nos importaba el covid, para ser sincero”, dijo Flores.
Dos días después, se despertó con fiebre alta y llagas en el cuerpo, dijo Flores a Erin Burnett de CNN. Una semana después, estaba en el hospital, donde le pusieron un tubo de respiración durante su estadía de una semana.
Arizona ha sido una de las áreas más afectadas en la pandemia recientemente, con casos en aumento. El estado tiene ahora al menos 84.093 personas infectadas, en comparación con 46.689 reportadas el 19 de junio.
Esa noche en el bar, Flores dijo que estaba allí con amigos y “solo estábamos disfrutando nuestra vida en ese momento”, dijo.
El bar estaba lleno con entre 300 y 500 personas, dijo Flores.
Pero días después, cuando apareció la fiebre, “fue bastante malo. Sabía que algo andaba mal”, dijo Flores. Días después, su prueba de covid-19 había salido positiva.
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La tos comenzó cuando respiró hondo, dijo Flores.
“En 24 horas no podía respirar sin temer por mi vida”, dijo.
Antes de contagiarse con el virus, Flores dijo que se mantenía activo, iba al gimnasio y no tenía condiciones preexistentes.
“Nunca hubiera imaginado en un millón de años que contraería este virus de la forma en que lo hice”, al enfermar de forma grave aproximadamente una semana después, dijo Flores.
“Cuando decidí ir al hospital, también decidí hacer público este mensaje, porque sabía que había cometido un error”, dijo Flores.