(CNN) – La tensión está hirviendo en las aguas del Mediterráneo oriental mientras Grecia y Turquía, aliados de la OTAN pero rivales históricos, avanzan lentamente hacia un posible enfrentamiento militar que podría terminar envolviendo a la región.
Buques de guerra de ambos países hicieron el martes una demostración de fuerza en la disputada región del Mediterráneo Oriental, mientras una carrera por las reservas de gas y petróleo agrega un nuevo punto de fricción a viejas disputas.
Mientras los aliados de la OTAN se han involucrado en una diplomacia de cañoneras que ha atraído a más países a la disputa, Alemania ha estado buscando reducir las tensiones que amenazan con extenderse a nivel regional.
“Las ventanas de conversación entre Grecia y Turquía ahora deben abrirse más, y no cerrarse. Además, en lugar de nuevas provocaciones, ahora finalmente necesitamos pasos para relajarnos y el inicio de discusiones directas”, tuiteó el ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Heiko Maas, tras visitar a Atenas y Ankara el martes en un esfuerzo por que los dos países vuelvan a la mesa de negociaciones.
Las tensiones estallaron cuando Ankara anunció que extenderá la duración de una misión de exploración sísmica en las aguas en disputa que originalmente se esperaba que terminara el lunes en una nota de navegación marítima utilizando el sistema global NAVTEX. El buque de inspección Oruc Reis está acompañado por buques de guerra y el Ministerio de Defensa turco anunció ejercicios marítimos en la zona.
“Los barcos de la armada turca y aliados realizarán entrenamientos marítimos en el este del Mediterráneo el 25 de agosto de 2020 para promover la coordinación y la interoperabilidad”, dijo el martes el Ministerio de Defensa en un tuit.
Según un estudio de 2010 del Servicio Geológico de Estados Unidos, se estima que hay 1.700 millones de barriles de petróleo recuperable y 122 billones de pies cúbicos de gas en la sección de la Cuenca del Levante del Mediterráneo oriental.
Grecia considera ilegal la exploración de gas turca. Atenas ha respondido emitiendo un mensaje de respuesta NAVTEX y anunciando ejercicios navales en el mismo lugar al sur de Turquía y la isla griega de Kastellorizo, que se encuentra a poco más de un kilómetro y medio de la costa turca.
“Grecia está respondiendo con calma y disposición tanto a nivel diplomático como operativo. Y con confianza nacional hace todo lo necesario para defender sus derechos soberanos”, dijo el lunes a la prensa el portavoz del gobierno de Grecia Stelios Petsas, según Reuters.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, calificó la respuesta griega como “malcriada” y dijo que “pone en peligro la seguridad de la navegación” para los barcos en el área. “A partir de ahora, Grecia será la única responsable de cualquier desarrollo negativo en la región”, dijo Erdogan el lunes.
Los esfuerzos alemanes para lograr un acuerdo entre Grecia y Turquía fracasaron a principios de julio. Turquía detuvo los estudios sísmicos de gas en el área en disputa mientras las negociaciones estaban en curso. Pero, según el Gobierno turco, esas conversaciones fracasaron después de que Grecia firmó un acuerdo de demarcación marítima parcial con Egipto.
Desde entonces, Turquía ha estado realizando prospecciones en las aguas en disputa. “Nuestros barcos de perforación continúan sus operaciones según lo planeado. Nuestro caso es sólido según el derecho internacional. Grecia se une a ciertos países para parecer tener razón, porque carece de credibilidad”, dijo el martes el ministro de Energía de Turquía, Fatih Donmez.
Donmez parecía referirse al apoyo que Grecia, que es miembro de la Unión Europea, ha recibido de Francia y los Emiratos Árabes Unidos.
En una muestra de solidaridad con Grecia, Francia dijo que aumentará su presencia militar en el Mediterráneo oriental en respuesta a la exploración de hidrocarburos de Turquía y envió aviones de combate y buques de guerra a la isla griega de Creta a mediados de agosto.
La disputa territorial entre Turquía, Grecia y la isla dividida de Chipre ha estado retumbando regionalmente durante años. Pero, “los recursos de gas natural costa afuera de la región han cambiado todo [en el Mediterráneo oriental] en el transcurso de los últimos cinco años”, dice Michael Tanchum, investigador principal del Instituto Austriaco de Estudios Europeos y de Seguridad. Esto lo ha convertido en “un campo de batalla clave en el que convergen las grandes fallas geopolíticas que involucran a la UE y la región de Medio Oriente y África del Norte”, agregó.
El área en disputa también está vinculada a reclamos territoriales de Chipre. La isla permanece dividida entre la República de Chipre reconocida internacionalmente y miembro de la UE de habla griega en el sur, y la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre, que solo es reconocida por Turquía.
La República de Chipre ha otorgado licencias a empresas internacionales, como la italiana ENI y la francesa Total, para explotar las reservas de gas en el Mediterráneo Oriental. El Gobierno turco ha argumentado que esto elimina a los turcochipriotas de los recursos de hidrocarburos en la región.
“Tanto Francia como su socio cercano, los Emiratos Árabes Unidos, compiten con Turquía por la influencia en Oriente Medio y África. El Mediterráneo oriental es donde Francia y los Emiratos Árabes Unidos pueden presionar a Turquía en una región que Turquía considera vital para sus intereses nacionales. Esto ha vuelto a poner a Turquía sobre los talones y Ankara ha respondido doblando la apuesta con repetidas rondas de escalada”, dijo Tanchum.
Pero los riesgos del enfrentamiento son obvios. “Ya ha habido una colisión entre un buque de guerra griego y un buque de guerra turco, en la que el buque turco sufrió algunos daños”, dijo Tanchum, refiriéndose a un incidente informado en agosto. “El peligro de un error de cálculo o de más accidentes que provoquen un choque abierto que nadie quiere es ahora peligrosamente alto”.