(CNN) – A medida que el poderoso huracán Laura avanza hacia EE.UU., hay preocupación porque es posible que haya fuertes marejadas ciclónicas.
El último aviso del centro advirtió que marejadas ciclónicas de hasta 4,5 metros podrían abrumar las costas en Texas y Louisiana
Pero tal vez te estés preguntando (y no serías el único): “¿Qué es una marejada ciclónica?”.
Una marejada ciclónica es una elevación gradual del nivel del agua causada por los vientos de una fuerte tormenta o huracán mientras se acerca a la orilla.
“Mientras la tormenta se acerca a la costa”, dijo a CNN el meteorólogo Gene Norman, “eleva el nivel del agua al enviar esas olas tierra adentro”.
Los vientos empujan el agua hacia la orilla, dijo Norma. Pero esa agua no solo entra y luego se va.
Con el tiempo, con cada ola que entra, esa agua se empezará a acumular lentamente, elevando el nivel promedio del agua en la orilla –similar a la marea– hasta que termine tragándose una playa o se eleve por encima de un embarcadero.
Y nuevamente, esa agua no se va simplemente. Dependiendo de cuánta agua haya sido empujada hacia la orilla, y de la cuenca en la zona, esa agua podría quedarse.
Por ejemplo, dijo Norman, “si el agua llega a Everglades, bueno, esa zona en su mayoría es agua. Así que duraría bastante”.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dice que la marejada ciclónica es “habitualmente la mayor amenaza a la vida y a la propiedad durante un huracán”, algo en lo que Norman está de acuerdo.
“La marejada ciclónica es la parte más peligrosa de la amenaza de un huracán”, dijo Norman, añadiendo que el peligro aumenta a medida que el agua destruye estructuras en tierra. La marejada ciclónica puede partir edificios y los escombros se agregan a las peligrosas aguas revueltas.
El sábado, el Centro Nacional de Huracanes dijo que partes de la costa del suroeste de Florida podrían experimentar una marejada ciclónica “catastrófica”, de 3 a 4,5 metros de altura. Esta es una de las razones por las que los funcionarios advirtieron a los residentes que moverse incluso unos kilómetros tierra adentro podría ser bueno para ellos.
“No sobrevivirán a esta oleada de tormenta”, advirtió el sábado el gobernador Scott. “Esta es una situación potencialmente mortal”.