(CNN Business) –– La pandemia les ha enseñado mucho a los empleadores sobre el valor de tener acuerdos flexibles de trabajo para sus empleados.
Tanto es así que el 83% ahora señala que, incluso cuando haya pasado la crisis actual, planea implementar políticas laborales más flexibles, como permitir que más personas trabajen desde casa o dejar que ajusten sus horarios.
Así lo reveló una encuesta reciente a casi 800 empleadores realizada por Mercer, una firma consultora de recursos humanos y beneficios en el trabajo.
El trabajo desde casa a menudo genera escepticismo entre gerentes y ejecutivos que asumen que eso resultaría en menos tareas realizadas si no están allí para supervisarlas. Pero un 94% de los empleadores encuestados dijo que la productividad de su empresa era en realidad fue misma (67%) o más alta (27%) que antes de la pandemia, a pesar de que muchos de sus empleados han estado trabajando de forma remota este año.
De cara al futuro, el 73% dijo que espera que una cuarta parte o más de su fuerza laboral continúe trabajando remotamente luego de la pandemia. Y uno de cada tres espera que la mitad o más de sus empleados lo hagan. Eso es un gran cambio frente los días previos a la pandemia, cuando solo uno de cada 30 empleadores lo permitía.
Pero la flexibilidad no se trata solo de trabajar en casa en lugar de la oficina. También incluye los momentos en que se realizan las labores. Una vez más, una gran mayoría (el 72%) dice que implementará una mayor flexibilidad en términos de horas, como turnos flexibles y semanas de trabajo comprimidas (por ejemplo, trabajar 10 horas al día durante cuatro días a la semana).
Para los padres de niños pequeños, esto será especialmente importante. Durante la pandemia, el 60% de los empleadores indicó que permiten que los padres ajusten sus horarios, y el 22% dice que está dejando a los padres cambiarse temporalmente a medio tiempo si es necesario.
Mientras tanto, otro 37% permite que los padres elijan cuándo hacen las labores que no necesitan completarse en un momento o lugar determinados, para adaptarse mejor a sus responsabilidades de cuidado durante el día.
“Por ejemplo, algunas [personas] pueden tener que interactuar con clientes o colegas durante momentos establecidos, pero pueden realizar otras partes de su función (análisis, almacenamiento, preparación, etc.) en otro momento”, dijo la directora de Mercer, Lauren Mason.
Las compañías encuestadas también señalaron algunos obstáculos y preocupaciones en la implementación de un lugar de trabajo más flexible. Los más grandes fueron la resistencia de los líderes y gerentes y/o la falta de habilidades de su parte para administrar una fuerza laboral flexible y preocupaciones sobre el mantenimiento de la cultura del lugar de trabajo existente.