(CNN Español) – La Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobó este miércoles una resolución que establece mayo de 2021 como plazo para la implementación de reformas electorales que garanticen elecciones libres y transparentes en dicho país centroamericano.
El documento, titulado “Restablecimiento de las instituciones democráticas y el respeto a los derechos humanos en Nicaragua mediante elecciones libres y justas”, fue copatrocinado por las delegaciones de Canadá, Chile, Colombia, Paraguay, Venezuela y Estados Unidos. Venezuela está representada en la OEA por Gustavo Tarre, embajador designado por la Asamblea Nacional, que preside el líder opositor Juan Guaidó.
La resolución fue aprobada con 20 votos a favor, dos en contra y 12 abstenciones, y entre otras medidas solicita a la secretaría general de la OEA que apoye “negociaciones incluyentes y oportunas entre el Gobierno de Nicaragua y los actores nacionales que representan a la oposición nicaragüense en torno a medidas de reforma electorales significativas y coherentes con las normas internacionales aplicables, y que preste asistencia técnica para su implementación a fin de promover elecciones libres y justas”.
También propicia la “modernización y reestructuración del Consejo Supremo Electoral para garantizar que funcione de manera totalmente independiente, transparente y responsable”, así como la actualización de registros de votantes (conocidos como padrones electorales) y que se garantice la observación electoral nacional e internacional.
La resolución también considera que debe haber un proceso político pluralista “que conduzca al ejercicio de los derechos civiles y políticos. Incluidos los derechos de libertad de reunión pacífica y libertad de expresión y registro abierto de nuevos partidos políticos”.
Finalmente, la resolución insta a establecer compromisos concretos, en particular de las reformas institucionales, antes que el Estado nicaragüense convoque elecciones generales, o a más tardar, en mayo de 2021.
Nicaragua rechaza la resolución de la OEA
La delegación nicaragüense en la OEA rechazó la convocatoria del tema y la resolución aprobada, las que según el embajador Luis Alvarado no han sido solicitadas ni autorizadas por el gobierno de Nicaragua.
En su intervención, Alvarado rechazó la declaración diciendo que era “injerencista”, “inaceptable” e “inadmisible”, y que no tenía “efecto vinculante” para el gobierno. “Por el contrario -afirmó-, transgrede los principios de la carta de Naciones Unidas, así como los fundamentos y propósitos de la carta de la OEA y los principios del derecho internacional”.
A través de un comunicado divulgado en sus en sus redes sociales, la opositora Coalición Nacional expresó que esta acusación de injerencia “no cabe en boca de quien violenta el orden constitucional y los tratados internacionales a los que el Estado de Nicaragua se ha obligado”.
“La Coalición Nacional reconoce el esfuerzo de la Asamblea General de la OEA, agradece su preocupación por la crisis política y humanitaria en Nicaragua, y el consistente llamado de la Organización al régimen de Ortega a que respete los derechos humanos y restituya las libertades fundamentales de los nicaragüenses” detalla el comunicado.
Tras la aprobación de la resolución, el embajador de EE.UU. en la organización, Carlos Trujillo, expresó en su cuenta de Twitter que “el pueblo de Nicaragua merece libertad y democracia”.
“En la Asamblea General de la OEA de hoy, apoyamos el llamado al restablecimiento del orden constitucional, el respeto de los DD.HH. y las libertades fundamentales y la organización de elecciones libres y justas”, tuiteó Carlos Trujillo.