(CNN Español) – La Asamblea Nacional de Nicaragua aprobó este martes la Ley especial de ciberdelitos. Según la bancada oficialista mayoritaria, el objetivo es reordenar y actualizar el marco legal de la materia. De acuerdo a varios diputados opositores y periodistas independientes, violenta los derechos humanos y la libertad de expresión, y limita el ejercicio periodístico.
La legislación se aprobó con el voto de 70 diputados de la Alianza Frente Sandinista de Liberación Nacional FSLN contra 16 votos de diputados opositores y la abstención de cuatro legisladores.
La nueva ley tiene por objeto prevenir, investigar, perseguir y sancionar los delitos cometidos “por medio de las tecnologías de la información y la comunicación, en perjuicio de personas naturales o jurídicas”. El artículo 30 establece que las publicaciones que perjudiquen el honor, el prestigio o reputación de una persona supondrán una pena de entre uno a tres años de prisión. Y además una multa de entre 150 y 300 días de salario.
La ley advierte que “si la publicación o difusión de la información falsa y/o tergiversada incita al odio o la violencia, pone en peligro la estabilidad económica, el orden público, la salud pública o la seguridad soberana” se impondrá una pena de entre 3 a 5 años de prisión y una multa de entre 500 a 800 días de salario.
Las opiniones sobre la Ley especial de ciberdelitos en Nicaragua
El diputado Jimmy Blandón Rubio, del opositor Partido Liberal Constitucionalista (PLC), expresó a CNN que considera peligrosa la interpretación del artículo, ya que deja a discreción qué es una noticia falsa. “Los periodistas no son responsables de las declaraciones de cada uno de nosotros. Es quien genera la noticia el que debe responder bajo el principio de responsabilidad personal, no quien la trasmite”, agregó.
Por su parte, el diputado Wálmaro Gutierrez, del Frente Sandinista, dijo a CNN que la legislación no violenta la libertad de expresión.
“Una cosa es que yo te diga lo que opine sobre un hecho –eso es libertad de expresión, es irrestricta y la Constitución me da ese derecho– y otra cosa es que, para hacerte pensar como yo pienso, yo empiece a tergiversar los hechos para trasladarte información falsa”, dijo.
Durante la presentación de la ley aprobada, la Secretaría parlamentaria dijo que se había consultado con la Corte Suprema de Justicia, Policía, Fiscalía y jefes de prensa de los canales 2, 4, 6, 8 y 13 (medios oficiales), así como con radios oficialistas, quienes dieron su aval al proyecto.
Pero para Michelle Polanco, periodista del indepediente Canal 10 de Nicaragua, la ley es amplia e imprecisa y podría afectar el ejercicio periodístico. “En esta ley no se especifica qué es noticia falsa y quién va a determinar qué es noticia falsa y qué no”, dijo Polanco.
A través de sus redes sociales, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) expresó este martes su rechazo y condena a la aprobación de la Ley especial de ciberdelitos. Según la institución, “viola la Constitución y numerosos tratados y convenios internacionales de DD.HH.”.
Agrega el Cenidh que la norma “viene a cercenar la libertad de expresión y prensa en Nicaragua”.
Iniciativa de ley por “crímenes de odio”
Antes de la aprobación de la Ley de ciberdelitos, la bancada sandinista presentó una iniciativa de reforma del artículo 37 de la Constitución de Nicaragua. El objetivo es castigar con cadena perpetua a quienes cometan lo que denominan crímenes de odio.
Varios representantes de sectores afines al gobierno dicen haber consignado 3 millones de firmas que respaldan la iniciativa, que se envió a una comisión legislativa para proceso de consultas.
El presidente Daniel Ortega pidió a la Corte Suprema de Justicia el 14 de septiembre “que impulse las reformas nacionales a las leyes nacionales para penalizar con prisión a cadena perpetua a quienes cometan crímenes de odio”.
Al día siguiente, durante el acto por el 199 aniversario de la independencia de Centroamérica, amplió su opinión sobre el tema. “Otros de ellos quieren ya seguir cometiendo asesinatos, colocar bombas, colocar destrucción, más destrucción de la que provocaron en abril de 2018, agregado a esto el daño que ha provocado la pandemia. No tienen alma, no tienen corazón, no son nicaragüenses, son hijos del demonio, son hijos del diablo, y están llenos de odio, cargados de odio están, están cargados de odio, exhuman odio. Eso es lo que exhuman: odio, odio, odio nada más. Son criminales, cobardes y se sienten, se sienten intocables porque se les dio una amnistía”, dijo.
A través de sus redes sociales, la oposición nicaragüense ha considerado que la Ley de ciberdelitos, la iniciativa de cadena perpetua y la Ley de agentes extranjeros aumentan la represión y pretenden criminalizar la protesta.