Vista general del Congreso en Managua el 15 de octubre de 2020.

(CNN Español) – Los diputados de la Asamblea Nacional aprobaron este martes una reforma legal que impone prisión perpetua a quienes cometan delitos de odio.

La reforma del artículo 37 de la constitución de Nicaragua se aprobó con el voto favorable de 70 diputados de la bancada sandinista, 15 votos en contra de diputados opositores y 3 abstenciones.

“Excepcionalmente se impondrá la pena de prisión perpetua revisable para la persona condenada por delitos graves cuando concurran circunstancias de odio, crueles, degradantes, humillantes e inhumanas que por su impacto causen conmoción, rechazo, indignación, repugnancia en la comunidad nacional” establece la reforma al artículo constitucional leída por el diputado Wilfredo Navarro de la bancada sandinista antes de su aprobación.

Iniciativa de la bancada oficialista

La iniciativa había sido presentada el 22 de octubre por 69 diputados de la bancada oficialista. La diputada sandinista María Auxiliadora Martínez expresó en el plenario que la reforma se produce por la necesidad de adecuar el texto constitucional a la realidad social –según ella– ante el clamor popular de la incorporación de una pena excepcional para los responsables de cometer crímenes atroces.

Con la justificación de castigar un crimen atroz contra dos niñas ocurrido el 12 de septiembre en el municipio Mulukukú, tres días más tarde el presidente Daniel Ortega propuso la imposición de cadena perpetua a quienes cometan crímenes atroces. Durante su discurso incluyó como autores de delitos de odio a los opositores a su gobierno.

“Ellos quieren seguir cometiendo asesinatos, colocar bombas, provocar destrucción, más destrucción de la que provocaron en abril de 2018” expresó el presidente Ortega el 15 de septiembre. Dijo esto durante el acto en saludo al 199 aniversario de la Independencia de Centroamérica. Siempre en referencia a la oposición, Ortega señaló: “No son nicaragüenses, son hijos del diablo y están llenos de odio, cargados de odio están”.

Críticas a la reforma aprobada

Por su parte el diputado Jimmy Blandón, del Partido Liberal Constitucionalista, quien votó en contra de la reforma, dijo a CNN que la norma constitucional es un marco general pero lo que define su aplicación es el código penal. Este, según dice, no define qué son delitos de odio. La definición de ese concepto, agregó Blandón, se hará hasta en una segunda legislatura, en enero.

Al ser consultada por CNN, Vilma Núñez, presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, expresó su condena y rechazo a esta reforma constitucional. La definió como “un manoseo a la institucionalidad jurídica y un esfuerzo desesperado del gobierno por mantener amedrentado y con miedo a la población”.

Con la aprobación de esta ley se completa el combo integrado por la “Ley de regulación de agentes extranjeros” y la “Ley especial de ciberdelitos”. De acuerdo con la oposición y el Parlamento Europeo, estas leyes violentan los derechos humanos y las instituciones democráticas.

“Hemos rechazado claramente el combo de iniciativas, entre ellas la implementación de cadena perpetua, que pretenden criminalizar y perseguir a la oposición, críticos y periodistas. Basta ya de violentar nuestra Constitución Política”, expresó este martes a través de sus redes sociales la opositora Unidad Nacional Azúl y Blanco. Esta reúne a decenas de expresiones y organismos de la sociedad civil en Nicaragua.