(CNN) –– El documental “The Last Dance” estuvo lleno de platos fuertes sobre la época de Michael Jordan con los seis veces campeones Chicago Bulls. Ahora, algunas ganancias de la producción ganadora del Emmy serán para llevar platos de alimentos a las mesas de quienes pasan hambre en EE.UU.
Feeding America, la organización de ayuda alimentaria más grande del país, agradeció este miércoles a “His Airness” por una donación de US$ 2 millones. Un gesto que llega mientras la pandemia empuja a un número exorbitante de estadounidenses fuera de la seguridad alimentaria.
“En estos tiempos desafiantes y en un año de dificultad inimaginable por el covid-19, es más importante que nunca hacer una pausa y agradecer”, dijo Jordan, 14 veces All Star de la NBA, en un tuit enviado por la organización.
“Me enorgullece donar ganancias adicionales de ‘The Last Dance’ a Feeding America y sus bancos de alimentos miembros en las Carolinas y Chicago”, añadió la estrella del deporte.
El exitoso documental de Michael Jordan hace más que entretener
“The Last Dance”, de ESPN, es una serie documental de 10 partes sobre uno de los mejores jugadores de baloncesto de la historia. (Y, sí, muchos fanáticos del baloncesto dirían que Jordan es el mejor). La producción fue una distracción muy oportuna en abril, cerca del comienzo de la pandemia.
El documental se creó con cientos de horas de imágenes que registran el ascenso de los Bulls al dominio total en la década de 1990. El enfoque especial está en la temporada 1997-1998, cuando Jordan y su equipo ganaron el último de seis títulos.
La serie documental se iba a emitir inicialmente a partir de junio. Sin embargo, cuando el covid-19 obligó a una pausa en la temporada de la NBA y otras ofertas deportivas, ESPN adelantó su lanzamiento para llenar el vacío de programación.
Tanto a los fanáticos más fieles de los deportes como a los aficionados ocasionales les encantó “The Last Dance”. Y así lo revelan las cifras: 5,6 millones de personas sintonizaron cada episodio en promedio. Esto lo convierte en el documental de ESPN más visto de la historia. Incluso, por encima de una producción de 2012 sobre el fenómeno de los deportes de la Universidad de Auburn, Bo Jackson.
La donación de Michael Jordan llega justo a tiempo. Feeding America advirtió a principios de este mes que más de 54 millones de estadounidenses pronto podrían enfrentar inseguridad alimentaria. Una cifra que rivaliza con las estadísticas de recesión.
Eso es aproximadamente el 16% de la población. O, en otras palabras, más de 1 entre cada 6 estadounidenses. La suma representa aproximadamente 17 millones más de personas de las que pasaban hambre antes del brote de coronavirus, según Feeding America.
“Lo que hemos visto ha sido, infortunadamente, un nivel constante de necesidad significativamente mayor desde que comenzó la pandemia”, afirmó Katie Fitzgerald, directora de operaciones de la organización sin fines de lucro. “Alrededor del 40% de las personas que se presentan para la distribución de alimentos nunca antes ha tenido que depender de la asistencia alimentaria caritativa”, añadió.
En abril, el Departamento de Agricultura de EE.UU. indicó que había reservado más de 1.700 millones para ayudar a los bancos de alimentos en la crisis que se avecina.
“Es un alivio”
Esta semana, Regina Status aceptó una canasta de alimentos, repleta de pavo y otros pilares del Día de Acción de Gracias en su apartamento del Bronx, Nueva York. Los productos venían de Agatha House Foundation, una despensa de alimentos local,
Ella no era elegible para el subsidio de desempleo y para sobrevivir dependía del dinero que reservó para el fondo universitario de sus hijas, según le dijo a CNN.
Perder su auto hace varias semanas hizo que su vida fuera más ardua. Está agradecida por las entregas semanales de Agatha House, señaló.
“Ni siquiera sabía de dónde iba a salir esto”, comentó. “Es un alivio que alguien realmente esté pensando en mí”.
Agatha House ahora ve muchas caras nuevas. Y registró un aumento del 100% en la demanda desde que comenzó la pandemia, según la fundadora Jeanette Joseph-Greenaway.
El Bronx, el distrito más pobre de Nueva York, sirve como un microcosmos de la crisis nacional. Justamente, tiene el mayor número de casos de covid-19 y la tasa de desempleo más alta en los cinco distritos. Lo que demuestra cómo la pandemia y sus severos efectos secundarios amenazan con agravar las ya flagrantes disparidades de salud entre las familias de bajos ingresos.
El hambre y los problemas de salud afectan más a las minorías
El distrito congresional en el que está el Bronx, compuesto principalmente por hogares negros y latinos, es el segundo peor del país en cuanto a la inseguridad alimentaria entre los niños. Condición que, además, solo se agrava con el cierre de escuelas.
“Hay 22 millones de niños que incluso antes de esta pandemia ya dependían del almuerzo gratis o reducido”, dijo la directora ejecutiva de Feeding America, Claire Babineaux-Fontenot. “Cuando escuchas que las escuelas están cerradas, eso no solo significa que hay desafíos para los niños con educación, sino que también significa que se pierden las comidas”.
Status conoce esta situación de primera mano.
“Tengo que comprar comida constantemente porque ahora debo suministrar alimentos para el desayuno. Ahora tengo que suministrar comida para el almuerzo”, dijo.
Antes de la pandemia, los estadounidenses negros tenían casi dos veces y media más probabilidades de vivir en hogares con inseguridad alimentaria que los blancos. Mientras que los latinos tenían el doble de probabilidades. Las cifras son de Feeding America, cuyas proyecciones para 2020 indican 18 de los 25 condados que serán más afectados son en su mayoría negros.
Feeding America opera en todos los condados de EE.UU., con una red de 200 bancos de alimentos y 60.000 despensas de alimentos. También ha instituido opciones de contacto bajo o nulo en muchos lugares, incluidos horarios exclusivos para personas mayores, despensas de autoservicio y entrega a domicilio ampliada.
Lauren Lee y Vanessa Yurkevich, las dos de CNN, contribuyeron a este informe.