(CNN) – Cuando a una pareja de Nueva York le dijeron que su casa de más de 100 años fue construida por un conocido contrabandista de la era de la Prohibición, la hicieron pasar por una leyenda de un pueblo pequeño.
Pero durante una reciente renovación de la casa, la pareja descubrió algo que reveló que la leyenda podría ser cierta.
A principios de octubre, Nick Drummond y Patrick Bakker dijeron que encontraron más de 66 botellas de whisky de la era de la Prohibición escondidas dentro de las paredes y las tablas del piso de su casa, que fue construida en 1915.
“Nuestras paredes están construidas de alcohol!”, escribió Drummond en Instagram. Él documentó el hallazgo inesperado en una serie de publicaciones en las redes sociales. “¡No puedo creer que los rumores sean ciertos! ¡En realidad era un contrabandista!”.
La pareja había estado viviendo en la casa, ubicada en el pequeño pueblo de Ames, a unas tres horas de la ciudad de Nueva York, durante un poco más de año. Decidieron comenzar renovaciones importantes hace dos meses.
Drummond, un diseñador y conservacionista histórico, le dijo a CNN que estaba quitando el faldón exterior, a lo largo del fondo del vestíbulo adjunto a la casa, cuando un paquete misterioso cayó.
“Me dije ‘¿qué es eso?’ Estaba muy confundido”, dijo. “Estaba mirando y había heno por todas partes, papel y vidrio … Vi otro paquete y es esta botella de whisky”.
“Dije: ¡No puede ser!. Esto es un alijo de whisky. Y es como si, de repente, apareciera la historia completa del contrabandista”.
La pareja encontró más botellas de whisky de la Prohibición
Drummond continuó y encontró más paquetes de whisky de contrabando debajo de las tablas del piso después de ingresar al vestíbulo a través de una escotilla descubierta dentro del piso. Dijo que siguen encontrando más botellas.
“Inicialmente encontramos siete paquetes de seis botellas en la pared y luego, en ese momento, encontramos cuatro paquetes más y, de hecho, como si no fuera suficientemente divertido, hace menos de una semana, encontramos más”, dijo Drummond.
El licor es una marca de whisky escocés con la etiqueta Old Smuggler Gaelic Whisky, que todavía se elabora. Cada botella estaba envuelta en papel de seda y paja y empaquetada en un paquete de seis, dijo Drummond.
El dueño original de la casa era un hombre alemán conocido como el conde Adolph Humpfner.
Después de investigar artículos de periódicos y varios sitios web legales, Drummond dijo que descubrió que se sabía que Humpfner era un hombre misterioso en la ciudad y participó en muchos escándalos. Murió de muerte súbita y dejó el licor de contrabando, así como una fortuna muy disputada.
La serie de descubrimientos llevó a Drummond a seguir documentando la renovación de su hogar en las redes sociales. Los seguidores se han acercado para participar en el aprendizaje de una nueva historia sobre la casa y su propietario de contrabando.
La pareja planea dejar las botellas que encontraron vacías o evaporadas conservadas en la casa, y vender las botellas que encontraron llenas. Las botellas llenas se estiman en un valor de alrededor de US$ 1.000 cada una, dijo Drummond.
La pareja dijo que se quedarán con una de las botellas llenas de whisky para probar.