(CNN) –– Asesores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) convocaron a una reunión de emergencia para este martes con respecto a la posible vacuna contra el covid-19. El objetivo será votar sobre qué personas recomiendan sean las primeras en recibirla cuando sea autorizada.
El Comité Asesor de Prácticas de Inmunización (ACIP, por sus siglas en inglés) de los CDC quiere asesorar al público antes de cualquier decisión de la Administración de Medicinas y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) sobre la autorización de emergencia de una vacuna, dijo a CNN el presidente del comité, Dr. José Romero.
“Nos estamos reuniendo porque la FDA, la Operación Warp Speed, han pedido a los estados y otras jurisdicciones que presenten sus planes el viernes de la semana que viene”, indicó Romero.
“Prevemos una autorización inminente si se demuestra que esta vacuna es efectiva y segura en un futuro cercano. Y queremos estar en el punto en el que brindemos pautas adecuadas a los estados y jurisdicciones para el uso de estas vacunas”, dijo Romero. Ademas de presidir el ACIP, Romero es secretario de Salud del Departamento de Salud de Arkansas.
“Esto no es algo apresurado. Ya hemos discutido los grupos dentro del primer nivel. Simplemente estamos revisando los datos una vez más y teniendo una votación principalmente en el grupo 1a del primer nivel. Es decir, los proveedores de atención médica y las personas en instalaciones colectivas a largo plazo”, indicó.
El ACIP se reunió el lunes pasado para discutir los grupos prioritarios en recibir cualquier vacuna que obtenga la autorización de uso de emergencia de la FDA. Los CDC ya recomendaron que el primer grupo ––designado como 1a–– debe incluir proveedores de atención médica de primera línea y personal de apoyo.
“Es importante porque estas son las personas que están realmente en la primera línea proporcionando la atención”, dijo Romero.
El grupo 1a probablemente también debería incluir a los residentes de hogares de ancianos y otras instalaciones de atención a largo plazo, que han sido gravemente afectados por la pandemia, según los CDC. “Los residentes y el personal de las instalaciones de atención a largo plazo representaron el 6% de los casos y el 39% de las muertes en EE.UU. Esto a pesar de que los residentes de las instalaciones de atención a largo plazo representan menos del 1% de la población de EE.UU.”, dijo la Dra. Kathleen Dooling de los CDC a ACIP este lunes.
Vacunarlos podría hacer una gran diferencia, dijo Romero.
Al principio, no habrá suficientes vacunas para todos, por lo que hay que tomar decisiones.
Los CDC estiman que hay 21 millones de personas en el sector de atención médica, 87 millones de trabajadores esenciales, 100 millones de adultos con condiciones médicas de alto riesgo y 53 millones de personas de 65 años o más. El gobierno federal ha dicho que 40 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus podrían estar disponibles para finales de diciembre.
El Dr. Larry Corey, de la Universidad de Washington y quien dirige ensayos clínicos de la vacuna contra el coronavirus en EE.UU., ha dicho que si tanto Pfizer como Moderna obtienen la autorización de sus vacunas, podrían suministrar 50 millones de dosis más en enero y 60 millones más en febrero y marzo.
También se avanza en otras vacunas.
Esas vacunas requieren de dos dosis suministradas con tres o cuatro semanas de diferencia para ser efectivas. Por lo que eso significaría aproximadamente suficientes vacunas para cubrir a 75 millones de personas a finales de marzo.
Las prioridades del ACIP ayudarán a decidir quién tiene acceso primero a esas vacunas escasas.
“El plan es aplicar dosis de vacunas durante las próximas semanas o meses para cubrir los grupos 1a, 1b y 1c. No habrá suficientes vacunas para todos en la primera asignación”, indicó Romero.
“Es importante que el público comprenda que estamos tratando con grupos selectos de personas, no con el público en general”, insistió.
Pfizer solicitó la autorización de uso de emergencia a la FDA para su vacuna. También, la empresa de biotecnología Moderna confirmó este lunes que lo hizo. La FDA ha programado una reunión de sus propios asesores de vacunas para el 10 de diciembre. Las fuentes le dijeron a CNN que hay otra reunión planeada para el 17 de diciembre.
Romero dijo que era importante que las personas supieran que el ACIP realizará una reunión pública y una votación pública. Todas las reuniones de este comité son públicas y se transmiten en vivo.
Los miembros del ACIP también discutirán consideraciones clínicas. Una preocupación son si los efectos secundarios de la vacuna podrían afectar la fe en la seguridad de las inmunizaciones. También está la inquietud de si vacunar a los frágiles residentes de hogares de ancianos, quienes tienen probabilidades de sufrir una serie de eventos de salud independientemente de la vacunación, podría tener el mismo efecto en la percepción de seguridad
“Creo que podemos lidiar con eso”, dijo Romero.
Los asesores también discutirán cómo monitorear la seguridad después de la asignación de la vacuna, según el documento de la reunión.
Todo el proceso se desarrolla en una cronología más rápida de lo habitual. Los fabricantes de vacunas aceleraron el desarrollo y la fabricación. Además, han estado produciendo las vacunas al mismo tiempo que las prueban. Una situación que no se suele presentar.
Aunque las pruebas de seguridad y eficacia en sí mismas no se están reduciendo, la FDA considera la vacuna Pfizer y probablemente evaluará cualquier otra bajo autorización de uso de emergencia en lugar de aprobación completa. Justamente porque el primero es un proceso más rápido ante la pandemia. Las vacunas también deberán someterse a una aprobación completa más adelante.
Usualmente, el ACIP solo se reúne tres veces al año para considerar el calendario de vacunas. Pero, el comité agregó reuniones para considerar las vacunas contra el coronavirus.