La red Stop Mass Incarceration patrocinó una marcha infantil para exigir responsabilidades en el primer aniversario de la muerte de Tamir Rice, de 12 años de edad.

(CNN) – Durante un período de 16 años, los niños negros tenían seis veces más probabilidades de morir por disparos de la policía que sus pares blancos, según un estudio publicado en la revista Pediatrics que respalda la existencia de una disparidad que los activistas han subrayado durante mucho tiempo.

Por otra parte, los niños hispanos tenían tres veces más probabilidades de morir a tiros que los niños blancos, según el estudio.

“Los resultados no son sorprendentes, pero eso no quita la tragedia de estos resultados”, dijo a CNN la investigadora principal, la Dra. Monika K. Goyal. “Cuando vemos que esto se extiende a los niños, hace que este problema sea aún más trágico”, agregó.

El maltrato policial a las personas negras adultas ocupó un lugar central este año, en el que se desataron protestas en todo Estados Unidos tras casos de muerte o lesiones graves de personas que estaban bajo custodia policial. Casos similares en los últimos años que involucraron a niños negros, incluido Tamir Rice, de 12 años, han puesto de relieve cómo los menores también pueden ser víctimas de la violencia policial.

Goyal y su equipo encontraron que 140 adolescentes murieron por intervensiones policiales entre 2003 y 2018. De esos casos, 131 involucraron armas de fuego, según el estudio. La gran mayoría de las víctimas, aproximadamente el 93%, eran hombres, con una edad promedio de 16 años.

“Aunque estos números son pequeños, la Dra. Goyal señala que existe un posible efecto dominó, ya que la muerte de cada niño tiene un impacto de gran alcance en toda una comunidad”, dice un comunicado de prensa de Children’s National, donde Goyal es jefa asociada de la división de Medicina de Emergencia y Servicios de Trauma y directora de Asuntos Académicos e Investigación.

Que los datos sean un ‘llamado a la acción’

“Estos hallazgos son probablemente una subestimación del número verdadero”, dijo Goyal a CNN. “Esta (tasa) no incluyó a los niños que recibieron disparos pero no murieron”, explicó.

“Tuvimos un tamaño de muestra suficiente para mostrar que había grandes diferencias, cuando comparamos las muertes de niños debido a tiroteos policiales entre niños blancos y negros y niños blancos con hispanos. Teníamos los insumos apropiados”, agregó. “Habríamos encontrado esos mismos resultados en un período de tiempo más largo”, aseguró.

Durante este mismo período, 6.512 adultos murieron por disparos de la policía. Y los adultos negros e hispanos tuvieron las tasas de mortalidad más altas en comparación con los adultos blancos, según Children’s National.

Goyal espera que el estudio de estos casos fomente un cambio tangible, según dijo.

“Nuestro país realmente está considerando el uso diferencial de la fuerza policial en las comunidades de color”, dijo Goyal. “Estas disparidades se extienden a los jóvenes y mi esperanza es que estos datos sean un llamado a la acción para comenzar a involucrarse en ese trabajo arduo de comprender verdaderamente las políticas que exacerban estas disparidades”, agregó.

Goyal y su equipo pasaron más de siete meses revisando las estadísticas de lesiones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades para aislar las muertes relacionadas con armas de fuego. Compararon los datos de los certificados de defunción utilizando información de la Oficina del Censo de Estados Unidos sobre grupos raciales y étnicos.

Su trabajo se suma a un creciente cuerpo de datos sobre las disparidades raciales que enfrentan los niños negros en comparación con sus pares.

Otras estadísticas de la vida cotidiana reflejan a qué están expuestos los niños negros

Los niños negros e hispanos tienen más probabilidades de ser hospitalizados después de contraer el coronavirus que los niños blancos. También es más probable que tengan tasas de casos más altas y complicaciones relacionadas con el virus.

Y las disparidades de salud existían antes de la pandemia: los bebés negros recién nacidos tienen tres veces más probabilidades de morir cuando son atendidos por médicos blancos (en oposición a cuando los atienden personas negras). Y los niños negros, incluso cuando están sanos, tienen 3,5 veces más probabilidades de sufrir complicaciones graves o morir después de una cirugía.

Los niños negros también tienen más probabilidades de desaparecer que los niños blancos, a pesar de que representan una porción más pequeña de la población de Estados Unidos.

En julio, Nolan Davis, de 8 años de edad y de Missouri, organizó y dirigió una “Marcha de Black Lives Matter de niños” que atrajo a casi 700 participantes, incluidos niños. En la marcha se podía escuchar a cientos de estos niños cantando: “Somos los niños, los niños poderosos, poderosos. Estamos aquí para decirles que las vidas de los negros importan”.

Nolan quería asegurarse de que se estuvieran escuchando todas las voces, le dijo su madre a CNN.