(CNN Español) – En la jornada en la que Uruguay alcanzó su récord de contagios diarios al sumar 946, y cuando la cifra de muertes por covid-19 sigue aumentando al subir a 221, el gobierno del presidente Luis Lacalle Pou anunció que las fronteras del país permanecerán cerradas para los ingresos vía aérea, terrestre y marítima hasta fin de enero.
En cambio, el presidente uruguayo anunció la flexibilización de otras medidas, como la ampliación del horario de bares y restaurantes hasta las 2 a.m. y el retorno de los espectáculos públicos con aforo mínimo, así como de los espectáculos deportivos sin público.
En conferencia de prensa desde la casa de gobierno, Luis Lacalle Pou dijo que “la estrategia no está fracasando”, al defender sus políticas para enfrentar el virus que hasta el mes de noviembre parecía estar bajo control en el pequeño país sudamericano, pero que desde entonces ha crecido de manera exponencial.
Uno de los temas que más reclamos genera desde la oposición es el hecho de que Uruguay todavía no tiene ningún acuerdo firmado para adquirir vacunas. Al respecto, el presidente dijo que Uruguay negocia con varios laboratorios y que intenta “colarse” entre los países más grandes para adquirir la vacuna.
Por su parte, el presidente de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), Leonardo Cipriani, negó un comunicado interno de su propia institución, difundido por el noticiero Subrayado, que daba cuenta de la saturación de un Centro de Tratamientos Intensivos, y dijo que los servicios públicos de salud tienen “buena capacidad de camas” de CTI.