Los paquetes de leche materna de Katy Bannerman fueron donados a madres que los necesitaban.

(CNN) – Cuando Katy Bannerman abrió su congelador, estaba rebosante de paquetes de leche materna: más de 234 litros, en concreto. Durante la pandemia de coronavirus, esta madre de dos niños, de Carolina del Norte, comenzó a donar su suministro extra de leche materna a otra madres que tienen dificultades para lactar.

Bannerman se inspiró en su propia experiencia para donar el excedente de su leche materna, después de que ella misma tuviera problemas de lactancia durante la infancia de su primer hijo. Pero, cuando quedó embarazada del segundo, estuvo decidida a superar sus dificultades anteriores.

Después de buscar ayuda de un asesor de lactancia privado, Bannerman comenzó a producir más de lo que necesitaba y extraía más de 2 litros de leche materna en un día. Entonces, decidió donar el excedente de su leche para ayudar a las mamás que enfrentan dificultades como las que ella tuvo antes.

“Ese era el tipo de persona que quería que la recibiera (la leche). Alguien que hubiera tenido problemas con la lactancia por una u otra razón”, le dijo Bannerman a CNN.

Katy Bannerman tuvo problemas de lactancia con su primer hijo, pero pudo superarlos con el segundo.

Al principio, cuando comenzó a producir más de lo que necesitaba, Bannerman no sabía qué hacer con tanta leche materna extra. Entonces acudió a grupos locales de Facebook en los que las mujeres mantenían comunidades en línea en torno a la lactancia materna y el amamantamiento, y que incluían peticiones de leche materna.

Bannerman terminó publicando acerca de su excedente de leche y recibió toneladas de mensajes de madres interesadas.

“Estaba tan contenta de poder donar. En un momento dado, tenía personas constantes a las que donaba, que venían todas las semanas”, relató.

Muchas mujeres atraviesan problemas con la lactancia

Una de las familias que se benefició de las donaciones de Bannerman había adoptado un bebé recientemente y necesitaba leche materna. Otra familia tenía un bebé que sufría de retraso del crecimiento, una condición en la que el peso de un niño es significativamente menor al de otros niños de edades similares. El suministro de leche materna de Bannerman tenía un alto contenido de grasa que podía ayudar a aumentar la ingesta calórica del bebé y hacerlo ganar más peso más rápido.

Botellas vacías listas para llenarse con leche materna.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades estiman que el 60% de las madres dejan de amamantar antes de lo que desean. Algunos de los factores que citan son problemas de lactancia, falta de apoyo familiar y preocupaciones sobre el peso y la nutrición de sus bebés. La Academia Estadounidense de Pediatría también recomienda que los bebés sean alimentados exclusivamente con leche materna durante sus primeros seis meses. Sin embargo, esto sucede solo cerca del 25% de las veces.

Durante la infancia de su primer hijo, Bannerman solo pudo amamantar durante dos meses. “No pude amamantar como quería y eso me afectó de manera horrible”, contó.

Bannerman, que se reprochaba a sí misma por la situación y sentía como si hubiera fallado, estuvo decidida a buscar la ayuda de un asesor de lactancia privado para su segundo hijo. Después de superar con éxito sus problemas de lactancia, Bannerman ahora anima a las mujeres a buscar todos los recursos disponibles para las madres.

“Esa es otra razón por la que donar era tan importante para mí, que las mujeres podían cuidarse a sí mismas y cuidar a sus bebés sin esa culpa”, explicó Bannerman.

En octubre, Bannerman dejó de extraerse el excedente de leche materna. Donó su último suministro en diciembre.