Nota del editor: Mari Rodríguez Ichaso ha sido colaboradora de la revista Vanidades durante varias décadas. Es especialista en moda, viajes, gastronomía, arte, arquitectura y entretenimiento, productora de cine y columnista de estilo de CNN en Español. Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivamente suyas. Lee más artículos de opinión en cnne.com/opinion.
(CNN Español) – Un amigo mío que trabajaba en la entonces muy famosa boutique inglesa Jaeger de Nueva York, me contó que Jacqueline Kennedy era una de sus mejores clientas y que una vez al año hacía una compra de 12 pantalones negros idénticos y 12 pulóveres de cuello de tortuga (o “turtlenecks”) negros y también iguales. ¡Era su uniforme favorito, pantalones y pulóver negros de cuello!
Y me contaba mi amigo que Jackie los compraba porque así los tenía en sus diferentes casas, la de Nueva York, en Hyannis Port, en Palm Beach y después de casada con Aristotle Onassis en la isla de Skorpios y en el famoso yate “Christina O” de su multimillonario marido. Y vestida así la vi muchas veces caminando temprano en la mañana cerca de su apartamento del 1040 en la Quinta Avenida —a pasos del colegio de mi hija—.
Es curioso, pero otras famosas —como Audrey Hepburn, Marilyn Monroe, Brigitte Bardot, la princesa Diana y hoy en día, Sarah Jessica Parker y la propia Carolina Herrera— también han escogido este “uniforme” clásico y elegante como parte vital de su imagen. Un look en negro que nunca falla y —más importante aún— nos hace sentir seguras y elegantemente “a sotto vocce”.
Este conjunto -todo en negro- siempre me ha encantado y por años ha sido la base de mi vestuario —y parte esencial cuando voy de viaje—. Tengo infinidad de pantalones negros y blusas de seda y “turtlenecks” negros y los uso diariamente. Y ahora —como consecuencia de la pandemia y los cambios en nuestro estilo de vida — este “uniforme” vuelve a estar en primera fila de la moda.
Hay que notar que, sin embargo, hay mujeres que jamas visten así, todas de negro —especialmente de día— y me causa interés ver que siempre llevan ropa muy variada, en muchos colores y estampados. En lugares cálidos y tropicales es lógico. Pero en ciudades como Nueva York, París o Londres, el uso de este “uniforme” —o variaciones del mismo— se ven muy apropiados.
OPINIÓN | ¡Un año de cambios! Y un limbo no tan limbo
¿Un poco de historia de la moda? En los años 20, Coco Chanel creó la imagen precursora de este look al diseñar su “little black dress” o “vestidito negro” que rompió moldes y se convirtió en el máximo “chic” femenino. Y décadas más tarde —en los años 50— en la etapa de los llamados “existencialistas” parisinos, la cantante Juliette Gréco y la icónica Brigitte Bardot usaron el “uniforme” a menudo.
Diseñadores como Donna Karan y Tom Ford siempre han adorado crear fabulosas variaciones de este look, igual que en los años 60 Yves Saint Laurent creó otro maravilloso “uniforme” al imponer en la moda el traje pantalón negro y su “tuxedo suit” ¡que enseguida nos enloquecieron y se usan hasta el día de hoy! ¡Bravo por todos ellos!
Y esto nos trae a 2020 y la pandemia de covid-19, cuando el vestir “a la moda” pasa a un segundo plano y las mujeres buscamos el confort de ropa calmada, discreta y fácil de llevar en casa. Y ahí es que regresa triunfal el probado y amable “uniforme”.
¡Bienvenido sea!