Hong Kong (CNN) – Han sido apodados los “pequeños hombres azules” de China, una milicia marítima presuntamente controlada por Beijing que, según los analistas, podría tener cientos de barcos y miles de tripulantes.
China no reconoce su existencia y cuando se le pregunta, se refiere a ellos como “la supuesta milicia marítima”.
Pero los expertos occidentales dicen que la supuesta milicia es una parte integral de los esfuerzos de Beijing para ejercer sus reclamos territoriales en el Mar de China Meridional y más allá. Afirman que sus embarcaciones pintadas de azul y sus tripulaciones, supuestamente financiadas y controladas por el Ejército Popular de Liberación, pueden llevar rápidamente una presencia china tan grande alrededor de arrecifes e islas en disputa que es casi imposible desafiarla sin desencadenar una confrontación militar.
La aparente milicia fue noticia el mes pasado cuando más de 200 barcos pesqueros chinos se apiñaron alrededor de Whitsun Reef, una posesión filipina en la cadena de islas Spratly en el Mar de China Meridional.
Los analistas del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS) en Singapur dicen que nunca antes habían visto una operación china de este tamaño.
“El incidente de Whitsun Reef no tiene precedentes en escala y es notable por su duración: la mayor cantidad de barcos pesqueros chinos se reunieron en cualquier momento en un arrecife de Spratly y permanecieron allí durante varias semanas”, Samir Puri y Greg Austin, ambos becarios senior de el IISS, escribió la semana pasada en el blog de la organización.
Filipinas protestó por el incidente de Whitsun en Beijing, calificando a los barcos de “presencia amenazante y de agrupamiento” y diciendo que la flotilla estaba infringiendo el territorio filipino y las zonas de pesca. Manila exigió que los barcos chinos abandonaran la zona, que sostiene que se encuentra en zona económica exclusiva.
Beijing respondió que los barcos, que en un momento sumaron 220, según el gobierno filipino, simplemente escapaban del mar embravecido moviéndose dentro de una laguna formada por el arrecife Whitsun en forma de boomerang, que Beijing llama Niu’e Jiao y reclama como parte de su territorio.
“Debido a la situación marítima, algunos barcos de pesca se han estado refugiando del viento cerca de Niu’e Jiao, lo cual es bastante normal. Esperamos que las partes relevantes puedan ver esto de manera racional”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Hua Chunying.
La Embajada de China en Manila fue más directa. “No hay una milicia marítima china como se alega”, dijo.
El ir y venir diplomático entre funcionarios filipinos y chinos continuó la semana pasada, y la Embajada China en Manila calificó los comentarios del secretario de Defensa filipino sobre los barcos chinos como “desenfrenados” y “desconcertantes”.
El Departamento de Relaciones Exteriores de Filipinas respondió, deplorando la declaración de la Embajada de China, recordando a China que sus diplomáticos son “invitados” en Manila y prometiendo realizar protestas diplomáticas diarias mientras los barcos chinos se encuentren en las zonas marítimas de Filipinas.
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¿Cómo funciona supuestamente la milicia marítima china?
A pesar de las negativas del gobierno chino, hay poca ambigüedad en los círculos occidentales sobre lo que el Pentágono llama Milicia Marítima de las Fuerzas Armadas del Pueblo (PAFMM).
“La milicia marítima de las Fuerzas Armadas del Pueblo no pesca”, dijo a CNN Carl Schuster, exdirector de operaciones del Centro de Inteligencia Conjunto del Comando del Pacífico de Estados Unidos. “Tienen armas automáticas a bordo y cascos reforzados, lo que los hace muy peligrosos a corta distancia. Además, tienen una velocidad máxima de alrededor de 18-22 nudos, lo que los hace más rápidos que el 90% de los barcos pesqueros del mundo”.
Algunos expertos han comenzado a referirse a la milicia como “Pequeños hombres azules”, una referencia al color de los cascos de sus barcos y a los “Pequeños hombres verdes” de Rusia, soldados con uniformes verdes sin distintivos que se infiltraron en Crimea antes de que Moscú la anexara de Ucrania en 2014.
“Beijing utiliza la Milicia Marítima ‘para subvertir la soberanía de otras naciones y hacer cumplir reclamos ilegales’”, dijo un informe de diciembre de los jefes de la Armada, los Marines y la Guardia Costera de Estados Unidos.
“La milicia es un componente clave de las Fuerzas Armadas de China y parte de lo que llama el ‘Sistema de Fuerzas Armadas del Pueblo’”, escribieron Conor Kennedy y Andrew Erickson, dos destacados expertos estadounidenses en el tema, para el Colegio de Guerra Naval de EE.UU. en 2017.
Es “una fuerza organizada, desarrollada y controlada por el Estado que opera bajo una cadena de mando militar directa para llevar a cabo actividades patrocinadas por el Estado chino”, agregaron.
La supuesta milicia está integrada con la flota pesquera de China, la más grande del mundo con más de 187.000 barcos, dijo Erickson a CNN, pero el número real de barcos armados sigue sin estar claro para los expertos occidentales.
Cualquiera que sea su rango, los expertos dicen que pueden liderar grandes flotillas de barcos pesqueros reales en acciones para promover las políticas del gobierno chino y los reclamos territoriales, incluidos los del Mar de China Meridional.
“China es típicamente reservada sobre su Tercera Fuerza Marítima (detrás de la Armada del EPL y la guardia costera), que posiblemente podría contar en las miles de embarcaciones y en las decenas de miles de personal. Posiblemente más”, dijo Erickson a CNN.
Un informe del Departamento de Defensa de EE.UU. de 2020 sobre las fuerzas armadas chinas menciona solo 84 barcos de la milicia marítima, todos asignados a una unidad que opera en la ciudad de Sansha en la isla de Hainan, en el extremo norte del Mar de China Meridional. La unidad, establecida en 2016, recibe subsidios frecuentes para operar en las Islas Spratly, según el informe.
“Esta unidad de PAFMM en particular es también la más profesional de China. Sus fuerzas reciben salarios independientes de cualquier responsabilidad clara de pesca comercial y son reclutados entre los veteranos recientemente separados”, dijo.
Pero Erickson le dijo a CNN que los barcos vistos alrededor de Whitsun Reef en las últimas semanas se veían diferentes a los de la unidad de Hainan, lo que sugiere que los barcos de la milicia a tiempo completo son más numerosos de lo que se pensaba anteriormente.
Erickson y su colega Ryan Martinson, que escribieron en la revista Foreign Policy a fines del mes pasado, dijeron que el rastreo de algunos de los barcos chinos en Whitsun usando inteligencia de fuente abierta muestra que provenían de Taishan, en la provincia sureña de Guangdong, en China.
Al menos siete arrastreros “enormes” que estaban en la laguna de Whitsun podrían ser parte de “la unidad PAFMM más avanzada hasta ahora desarrollada y desplegada”, escribieron Erickson y Martinson.
Usando datos del sistema de identificación automática, dijeron que los barcos en Whitsun habían patrullado los Union Banks, donde se encuentra Whitsun Reef, así como otras características de las islas Spratly como los arrecifes Subi y Mischief, ambos construidos y militarizados por las fuerzas armadas chinas.
“No hay evidencia de pesca alguna durante estas operaciones enfocadas con láser, pero todos los indicios de provocación para reclamos territoriales”, escribió la pareja.
Los datos que Erickson y Martinson recopilaron de MarineTraffic.com muestran la frecuencia con la que la unidad ha estado en la cadena de las Islas Spratly durante el año pasado.
Al 29 de marzo, solo quedaban 44 barcos en la laguna de Whitsun Reef, informó CNN Philippines, afiliada de CNN, citando una declaración del Grupo de Trabajo Nacional del gobierno filipino para el Mar de Filipinas Occidental.
El resto se había dispersado a otros arrecifes e islas en disputa en aguas cercanas, agrega el comunicado.
¿Cuál es el propósito de una milicia marítima?
El concepto de una milicia marítima, o una fuerza naval irregular, permite a China hacer reclamos territoriales en grandes cantidades sin involucrar nunca al Ejército Popular de Liberación propiamente dicho, dicen los expertos occidentales.
Incluso si los barcos líderes como los mencionados por Erickson y Martinson son relativamente pequeños en número, pueden encabezar flotillas de cientos, como se vio en Whitsun Reef.
“Estas operaciones clásicas de la ‘zona gris’ están diseñadas para ‘ganar sin luchar’ abrumando al adversario con agrupamientos de barcos pesqueros”, escribió Derek Grossman, analista de defensa de RAND Corp, el año pasado.
Jay Batongbacal, director del Instituto de Asuntos Marítimos de la Universidad de Filipinas, resumió lo que Beijing ha hecho en las últimas semanas en Whitsun Reef y los últimos años en el Mar de China Meridional: 2 millones de kms cuadrados de agua, casi todas las cuales Beijing reclama como territorio chino.
“Ahora están esencialmente ocupando Whitsun Reef por la mera presencia de sus embarcaciones”, dijo Batongbacal en una entrevista con National Public Radio. “Ese es en realidad el objetivo de la estrategia china, establecer el control y el dominio de facto sobre todo el Mar de China Meridional a través de estos movimientos incrementales”.
Desde un punto de vista táctico, los barcos de pesca representan cientos de obstáculos que un adversario como la Armada de EE.UU. tendría que sortear. Y la Armada de EE.UU. probablemente solo desplegaría unos pocos destructores a la vez para desafiarlos.
Eso pone grandes números a favor de China.
“Debido a que son baratos, los barcos de pesca siempre superan en número a los barcos de guerra”, escribieron el investigador de la Universidad Johns Hopkins Shuxian Luo y el investigador de la Universidad de Columbia Jonathan Panter en la revista Military Review del Ejército de EE.UU. a principios de este año.
Por lo tanto, incluso los barcos pesqueros reales y desarmados que actúan bajo el liderazgo de buques de la milicia marítima pueden ser una fuerza militar eficaz.
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“En lugar de una amenaza cinética, los barcos pesqueros chinos presentan una amenaza más perturbadora. Desplegados incluso en cantidades limitadas, los barcos pesqueros pueden inhibir, si no prohibir por completo, la capacidad de un buque de guerra para llevar a cabo” operaciones de guerra y vuelo antisubmarinas con sus helicópteros, escribieron Luo y Panter.
Desde un punto de vista estratégico, “desafiar a estos buques es peligroso”, escribieron, especialmente para otras naciones del sudeste asiático que reclaman partes en el Mar de China Meridional pero que no tienen el poder militar para enfrentarse a China.
“Los estados más débiles, conscientes de la posible afiliación gubernamental de los barcos pesqueros chinos, podrían dudar meterse con ellos de una manera que podría provocar una respuesta de la República Popular China (gobierno central de Beijing)”, dijeron.
Debido a que China dice que no son buques militares, puede reclamar cualquier acción contra ellos por parte de armadas extranjeras o guardacostas constituiría un ataque contra civiles chinos.
“La fuerza de la milicia marítima es su negación, que permite a sus embarcaciones hostigar e intimidar a las embarcaciones y buques de guerra civiles extranjeros mientras deja a China margen para reducir la escala al negar su afiliación con estas actividades”, escribieron Luo y Panter.
Pero con esas cifras abrumadoras para China también viene el riesgo, dijeron los analistas.
“Los mismos factores que hacen de la milicia marítima una fuerza negable (sus tripulaciones civiles y tecnología de doble uso) también aumentan el riesgo de accidentes y escaladas”, escribieron Luo y Panter.
“Esta es una combinación tóxica: debido a la negación de la milicia marítima y los intereses centrales en juego, la República Popular China tiene un alto incentivo para emplearla, pero cuanto más frecuentes son sus operaciones, mayor es la probabilidad de interacciones con embarcaciones estadounidenses que podrían salirse de control”.
Y no son solo las interacciones con los barcos estadounidenses lo que podría desencadenar un conflicto más amplio.
Una declaración de la Casa Blanca dijo que el Asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, habló con su homólogo filipino y dijo que el Tratado de Defensa Mutua entre Estados Unidos y Filipinas se aplica en este caso.
Eso significaría que cualquier acción hostil contra las fuerzas filipinas o el territorio por parte de China podría traer una respuesta militar estadounidense.
Estados Unidos mantuvo el diálogo con Manila el jueves pasado, cuando el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, tuiteó que tuvo una conversación sustantiva con el secretario de Relaciones Exteriores de Filipinas, Teddy Locsin, “discutiendo nuestras preocupaciones con los buques de la milicia de la República Popular China en el Mar de China Meridional”.
China, por su parte, ha dicho que es Estados Unidos el que está en la raíz de las tensiones en el Mar de China Meridional, a nivel militar al enviar sus buques de guerra y aviones de combate a ejercicios allí, y a nivel diplomático con declaraciones belicosas.
Cuando el entonces secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, acusó el verano pasado a China de “intimidar” a su vecino del sudeste asiático, la embajada china en Washington dijo que el Departamento de Estado de Estados Unidos “distorsionó deliberadamente los hechos, exageró la situación en la región e intentó sembrar la discordia entre China y otros países del litoral”, informó el Global Times, administrado por el Estado.
¿Dónde se ha visto esta actividad antes?
El concepto de una milicia marítima china tiene sus raíces en los días inmediatamente posteriores a la revolución comunista en 1949, cuando el gobierno de Mao Zedong buscaba una defensa costera, escribió Grossman, el analista de RAND.
Sin ninguna armada de la que hablar, Beijing inyectó dinero y entrenamiento en una milicia marítima que quedó del régimen nacionalista que derrocó. Unos años más tarde, la colectivización de las pesquerías locales agregó una nueva capa de control del Partido Comunista a las milicias, dijo Grossman.
En la década de 1960, a medida que se desarrolló la Armada del EPL, entrenó a las milicias en tácticas y operaciones militares y las utilizó en más misiones de la Armada del EPL, agregó.
Pero en 1974, cuando China luchó con el entonces aliado de Estados Unidos, Vietnam del Sur, por el control de las Islas Paracel en el Mar de China Meridional, el uso de embarcaciones pesqueras en operaciones de combate demostró su valor, escribió Grossman.
La Armada del EPL utilizó dos arrastreros de pesca para llevar 500 soldados chinos a las islas en disputa, ya que la presencia de barcos de pesca chinos civiles a su alrededor ralentizó la toma de decisiones militares de Vietnam del Sur, dijo el analista de RAND.
Una vez que las tropas chinas estuvieron en su lugar, la guarnición de Vietnam del Sur se rindió.
“Una lección clave aprendida para Beijing fue que el apalancamiento de las fuerzas de la milicia pesquera era mucho menos probable que desencadenara la intervención de Estados Unidos en el asunto, incluso cuando el vecino amenazado era un aliado de Estados Unidos”, dijo Grossman.
En el Mar de China Meridional, Filipinas es uno de esos aliados de Estados Unidos, y China ha utilizado la milicia marítima en operaciones para obtener el control de un territorio reconocido por un tribunal de las Naciones Unidas como perteneciente a Manila, dicen expertos y funcionarios.
Grossman y otros señalan la presencia de una milicia marítima en las operaciones chinas que llevaron al control de Beijing de Mischief Reef y Scarborough Shoal en 1995 y 2012, respectivamente.
Un fallo de 2016 del Tribunal de la ONU dijo que tanto Mischief como Scarborough se encuentran en la zona económica exclusiva de Filipinas, pero China no reconoce el fallo y, de hecho, ha construido una de sus fortificaciones más grandes del Mar del Sur de China en Mischief.
El secretario de Defensa de Filipinas, Delfin Lorenzana, dijo el domingo que lo que China está haciendo ahora es una repetición de 1995 y 2012.
“El total desprecio por parte de la Embajada de China en Manila del derecho internacional, especialmente la Convemar en la que China es parte, es espantoso, Lorenzana dijo en un comunicado.
“La presencia continua de milicias marítimas chinas en el área revela su intención de ocupar más elementos en el Mar de Filipinas Occidental”.
China también ha utilizado barcos de pesca para enfrentarse directamente a la Armada de EE.UU., según la Iniciativa de Transparencia Marítima de Asia (AMTI), parte del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales.
El 9 de marzo de 2009, dos barcos de pesca, que operan con barcos de pesca y navales chinos, supuestamente intentaron apuntar al conjunto de sonar remolcado del USNS Impeccable, un barco de reconocimiento con tripulación civil, en el Mar de China Meridional. Los arrastreros chinos también se detuvieron frente al barco estadounidense, lo que obligó a realizar una parada de emergencia para evitar la colisión, según el informe de AMTI.
Mientras tanto, otro barco de investigación estadounidense, el USNS Victorious, estaba siendo acosado en el Mar Amarillo, según el informe.
China afirmó que los barcos estadounidenses operaban ilegalmente en su zona económica exclusiva. Washington dijo que sus barcos estaban en aguas internacionales y que tenían derecho a estar allí.
Un futuro precario
El incidente de 2009 mostró lo cerca que podían llegar Estados Unidos y China a una confrontación real debido al supuesto uso de barcos pesqueros por parte de Beijing con fines militares. Pero Grossman dijo que, dado que ni el incidente impecable ni ninguna de las ocupaciones de la isla han debilitado las ambiciones chinas en el Mar de China Meridional, es probable que haya más despliegues.
“Si la historia es una buena indicación de lo que se puede esperar en el futuro, entonces es probable que Beijing duplique el PAFMM en prácticamente cualquier escenario imaginable. Eso significa que debería ser una fuerza a tener en cuenta en los años venideros”, dijo.
Puri y Austin, los analistas de IISS, dijeron que Beijing ya está evaluando las reacciones a Whitsun Reef.
“El incidente de Whitsun Reef es una poderosa demostración de la voluntad de China de correr riesgos al reunir una concentración tan grande de embarcaciones en un área muy disputada”, escribieron.
“Si estas suposiciones analíticas son precisas, el liderazgo militar de China evaluará el desempeño de su incursión de milicias marítimas más reciente y las respuestas que ha obtenido de otros”, dijeron.
Robert Williams, director ejecutivo del Centro Paul Tsai China en la Facultad de Derecho de Yale, dijo que China probablemente trataría de mantener turbias las intenciones de cualquier milicia marítima y las reglas a las que se adhiere.
“China es muy eficaz en el uso de herramientas de coerción no militarizadas. Beijing no ha querido renunciar a estas herramientas, que considera que incurren en riesgos limitados de escalada con los países vecinos”, escribió Williams en el blog Lawfare de Brookings Institution.
Esencialmente, Beijing quiere que Washington y sus vecinos del Mar de China Meridional sigan adivinando.
“Sería una exageración… afirmar que el establecimiento militar chino disfruta con las crisis. Muchos pensadores del EPL son muy sensibles a los riesgos desestabilizadores de las crisis militares”, escribió Williams.
Pero China, dijo, ve “las señales ambiguas como una fuente de… disuasión”.
Esencialmente, si un adversario está constantemente tratando de evaluar intenciones, no está tomando medidas.