(CNN Español) – República Dominicana anunció este miércoles nuevas medidas para controlar la fabricación de bebidas con alcohol adulterado, en medio de lo que califican como un brote por intoxicación por bebida contaminada con metanol que ha provocado la muerte de 130 personas en lo que va de año. Además, se promulgó un decreto que regula la importación y venta del metanol.
El plan de lucha contra las bebidas alcohólicas ilegales, según se detalla en un decreto presentado por el presidente Luis Abinader, endurece las reglas para la importación y la comercialización de metanol e impide el trasiego clandestino de esa sustancia para falsificar bebidas.
Entre las disposiciones, el importador o distribuidor de metanol debe contar con un permiso de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD). Además, debe haber una inspección que certifique que cuenta con estrictos controles de acceso a sus almacenes.
Las autoridades también anunciaron la creación de dos mesas de trabajo. Una es para la implementación de un programa de inteligencia y trazabilidad en la cadena de importación y comercialización. La otra es para intensificar y coordinar operativos en fábricas y comercios en el país.
Desde febrero, las autoridades han desmantelado al menos cuatro destilerías e intervenido 400 comercios en diferentes puntos del país. Ocho fueron cerrados y 34 personas han sido detenidas.
El Ministerio de Salud Pública mantiene una alerta epidemiológica desde principios de abril. El organismo pidió a la población abstenerse de ingerir bebidas alcohólicas de producción clandestina, ya que actualmente el 40% de las personas que se intoxican con esas sustancias no sobreviven.