(CNN) – Una nueva especie de dinosaurio descubierta en Australia fue confirmada como la más grande que se haya encontrado en el país, y una de las más grandes del mundo.
El esqueleto fosilizado, apodado Cooper, se encontró en el suroeste de Queensland, en 2007, en Cooper Creek, en la cuenca de Eromanga.
Pero el esqueleto fue un misterio durante años, y no fue sino hasta ahora que los paleontólogos lo describieron científicamente y le dieron un nombre.
Los investigadores del Museo de Historia Natural de Eromanga (ENHM, por sus siglas en inglés) y del Museo de Queensland publicaron este lunes sus conclusiones en la revista científica PeerJ.
Se calcula que Cooper, cuyo nombre científico es Australotitan cooperensis, caminó por la Tierra hace más de 90 millones de años. Era un titanosaurio, una especie que se alimentaba de plantas y pertenecía a la familia de los saurópodos de cuello largo, la especie de dinosaurio de mayor tamaño.
Se estima que el dinosaurio alcanzaba una altura de entre 5 y 6,5 metros a la altura de la cadera, y una longitud de entre 25 y 30 metros, lo que lo hacía tan largo como una cancha de básquetbol y tan alto como un edificio de dos pisos, según el ENHM.
Con su largo cuello y cola podría parecerse al más conocido braquiosaurio.
Robyn Mackenzie, cofundadora del Museo de Historia Natural de Eromanga, dijo que el equipo de paleontólogos pudo establecer rápidamente, por el tamaño de los fragmentos óseos, que pertenecían a una especie de gran tamaño.
“Las piezas eran bastante grandes y voluminosas”, dijo. “Pudimos medir los huesos y compararlos con los de otras especies de Australia y del resto del mundo”.
Varias de las piezas grandes, incluidos los omóplatos, los huesos de la pelvis y las extremidades del dinosaurio, estaban en su mayoría intactas. Sin embargo, los investigadores se enfrentaron a retrasos en la identificación de la especie debido a las dificultades para manejar sus grandes y frágiles huesos.
El enorme tamaño de los huesos hacía que estuvieran almacenados en museos a veces a cientos de kilómetros de distancia unos de otros.
Así que el equipo utilizó tecnología 3D para escanear cada hueso del titanosaurio, lo que les permitió comparar digitalmente los huesos con los de especies similares.
Se descubrió que el Australotitan estaba estrechamente relacionado con otros tres saurópodos australianos que habían sido descubiertos más al norte, en la localidad de Winton.
El estudio también abre el camino a nuevos descubrimientos de dinosaurios que podrían realizarse en Australia.
“Los hallazgos han puesto a Australia en el mapa”, y han permitido que Australia se una a otros países que están avanzando en la paleontología, dijo Mackenzie. Este tipo de “dinosaurios gigantes” se han encontrado en su mayoría en Sudamérica hasta ahora, lo que hace que este descubrimiento sea aún más raro.
“Esto es solo la punta del iceberg de los descubrimientos en Australia”, dijo. “Ha abierto toda una nueva frontera de los dinosaurios”.