(CNN) – Es conocido que el Valle de la Muerte de California es un lugar caluroso, pero alcanzó los 130 grados Fahrenheit (54,4 grados Celsius) el viernes por quinta vez en la historia registrada, eso es solo cinco días de los más de 40.000 registrados.
Curiosamente, podía volver a suceder el domingo, y quizás también este lunes.
El récord del número de días consecutivos a 125 grados (51,6 centígrados) o más es 10, establecido en 1913 (del 28 de junio al 5 de julio). Este año, Death Valley llegó a 126 (52,2 centígrados) el 7 de julio y probablemente continuará ese tramo de días con temperaturas de más de 125 hasta el martes. Serían ocho días seguidos, que sería la segunda racha más larga en la historia registrada (empatando ocho días en 2013).
Más de 30 millones de personas en el oeste de Estados Unidos están bajo alertas de calor excesivo. Las alertas de calor se extienden desde el norte del estado de Washington hasta la frontera entre Arizona y México.
Grand Junction, Colorado, estableció un nuevo récord histórico de temperatura de 107 grados (41,6) el viernes.
Las Vegas empató su récord de temperatura de todos los tiempos de 117 grados (47,2 centígrados) el sábado. Fresno, California, también podría acercarse a su récord de temperatura de todos los tiempos de 115 (46,1) grados el domingo.
Pero ninguno se compara con los asombrosos 130 (54,4) grados en el Valle de la Muerte, 13 grados por encima de lo normal.
“Un sistema de alta presión anormalmente fuerte permanecerá por encima durante varios días”, dijo Chelsea Peters, meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional en Las Vegas. “Cuando el mínimo de la noche es más cálido que el del día anterior y se esperan tendencias de temperatura similares, es probable que el máximo del día termine siendo igual de caliente o más caliente que el día anterior”.
Pero a pesar de lo caliente que puede ser a 130, no es la temperatura más alta para el Valle de la Muerte, que es de 134 (56,6) grados, establecida en 1913. También se considera el récord mundial oficial, pero es un poco controvertido.
La controversia detrás del récord
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) es el organismo rector que determina los registros meteorológicos formales en todo el mundo, así como las nomenclaturas meteorológicas (como nombrar los sistemas tropicales).
Antes de 2013, la temperatura más alta registrada en el mundo era en realidad de 136,4 Farenheit (58 grados Celsius), establecida en 1923 en Al Azizia, Libia. Sin embargo, la OMM determinó más tarde que la medición de Libia era defectuosa y la descertificó oficialmente como la temperatura global más alta oficial de todos los tiempos, dando esa designación a la temperatura del Valle de la Muerte el 10 de julio de 1913.
Sin embargo, se especula que el registro de Death Valley de 1913 también pueda ser invalidado debido a una ubicación incorrecta de la instrumentación. Todos los sensores meteorológicos oficiales utilizados por el Servicio Meteorológico Nacional están ubicados estratégicamente para evitar la interferencia de la luz solar directa, el viento, los árboles o la humedad.
El récord de 134 en Death Valley se produjo en medio de una ola de calor anormalmente intensa que se extendió del 7 al 14 de julio de 1913. Las temperaturas máximas para ese período de tiempo fueron 127 (52,7), 128 (53,3), 129 (53,8), 134 (56,6), 129 (53,8), 130 (54,4), 131 (55) y 127 (52,7), respectivamente.
La OMM incluso tiene esto en su sitio web: “Algunos historiadores meteorológicos han cuestionado la exactitud de los registros de temperatura antiguos. El Archivo de la OMM para los fenómenos meteorológicos y climáticos extremos siempre está dispuesto a investigar cualquier registro extremo pasado cuando se presentan nuevas pruebas creíbles”.
Independientemente de si está de acuerdo con mantener los datos de 1913, ahí hace calor en estos momentos. No solo de día, sino también de noche. Y el calor intenso en ambos momentos del día es fundamental para la seguridad.
Las muertes relacionadas con el calor aumentan al final del verano
Se espera que las bajas temperaturas matutinas tanto el domingo como el lunes por la mañana en el Valle de la Muerte lleguen a 103 (39,4) grados, que es más de 10 grados por encima de lo normal. La temperatura récord más baja que existe es de 110 (43,3) grados Farenheit.
Esto es un problema, porque estas temperaturas no permiten que el cuerpo se enfríe con éxito durante la noche. La temperatura debe bajar a al menos a 80 grados (26.7 grados C) para comenzar la recuperación. De hecho, una persona puede perder hasta 2 litros de líquido durante la noche a través del sudor si la temperatura no desciende por debajo de los 85 (29,4) grados.
“Su cuerpo necesita refrescarse por la noche y, de hecho, lo espera mientras duerme”, dice Jenn Varian, meteoróloga de la oficina del Servicio Meteorológico Nacional de Las Vegas. “Cuando tenemos temperaturas muy cálidas durante la noche, su cuerpo simplemente no puede enfriarse adecuadamente, lo que en (y) por sí mismo puede causar complicaciones, pero también lo hará estar menos preparado para el calor del día”.
Las bajas temperaturas en otros lugares no son mucho mejores. El domingo por la mañana, se pronosticaban 93 (33,8) grados en Las Vegas. En Phoenix, es probable que las temperaturas no bajaran de 91 (32,7).
La duración también es importante, al igual que la época del año en que se produce el calor.
“Por ejemplo, un evento de calor en abril con temperaturas altas de 107 grados Farenheit (41,7 grados Celsius) probablemente justifique una advertencia de calor excesivo, mientras que la misma temperatura en julio es solo un par de grados por encima de lo normal, por lo que es poco probable que emitamos algo”, dijo Varian.
Lo mismo sucede al final de la temporada de verano, en agosto y septiembre, aunque la gente pueda pensar que para entonces ya se habrán aclimatado.
“En realidad, los informes forenses muestran que hay más muertes y enfermedades relacionadas con el calor al final del verano que en cualquier otra parte, porque su cuerpo está exhausto por luchar contra el calor extremo durante todo el verano”, dijo Varian.
La meteoróloga de CNN Haley Brink contribuyó a este informe.